
Las áreas de semillero constituyen la base de una siembra competente que, con los cuidados necesarios, garanticen altas producciones. Que aporten plantas saludables depende de las medidas fitosanitarias aplicadas, así concluíamos nuestra anterior entrega y a continuación las relaciono.
1. Seleccionar áreas con condiciones óptimas de calidad de suelo y drenaje.
2. Aplicar medidas de desinfección del sustrato antes de cada siembra con Trichoderma virides o T. harzianum a razón de 10-20 gramos por litro de agua (de 4-8 kg/ha ) o en polvo en dosis de 1 g/m2, 48 horas antes de la siembra. Solarización e inversión del suelo.
3. El semillero debe estar alejado o protegido de la influencia de cultivos colindantes, mediante barreras naturales o plantas trampas y repelentes, preferiblemente protegido con tapado o malla.
4. Realizar selección negativa de plantas y focos enfermos dejando un área limpia de 10 cm alrededor de estas.
5. Las plantas enfermas se sacarán fuera del área del semillero para ser incineradas.
6. Eliminar las posturas pasadas de tiempo y las que no se van a utilizar en el trasplante.
7. Realizar una adecuada desinfección de semillas, si no tienen calidad certificada, con Trichoderma harzianum o Trichoderma virides en forma líquida al 10 % (100 ml/l) volumen o en suspensión 20 g/l, en caso de polvo, por inmersión durante 10 min. Se seca la semilla al aire y puede almacenarse hasta 30 días antes de la siembra.
8. Conocer el porcentaje de germinación de la semilla para aplicar el volumen adecuado por área y evitar el exceso de plantas.
9. Almacenar la semilla en lugares frescos y secos, preferiblemente a temperatura de 20 a 2 oC.
MEDIDA DE ESCAPE A LAS PLAGAS Y ENFERMEDADES
Entre las medidas de control de plagas y enfermedades se encuentran las llamadas de escape. Consisten en realizar las siembras en su época óptima, cuando las condiciones climáticas son más adecuadas para su desarrollo. Este es uno de los factores que más favorecen el crecimiento y desarrollo de las plantas. En tales condiciones, pueden desarrollar sus mecanismos de defensa naturales y lograr un nivel de resistencia más alto.
El escape a la afectación por virus en solanáceas (tomate, pimiento y otros) se puede alcanzar con la obtención de posturas libres de enfermedades. Como se conoce, mientras más temprano se inocula el virus por la mosca blanca mayor es la afectación en la producción. Si se producen las posturas en semilleros protegidos, donde no puedan ser alcanzadas por vectores, estas llegan sanas a la plantación, lográndose menores pérdidas por enfermedades trasmitidas. De igual forma se aplican medidas de escape cuando se desarrollan posturas libres de infestaciones fungosas, bacterianas y nemátodos en la fase de semillero.