En huertos y parcelas inciden las inexistentes barreras verdes, no trampas de colores, mal uso de las fases lunares o el estrés de las plantas, factores que, entre otros, facilitan el ataque y diseminación de plagas y enfermedades.
Conviene conocer sus manifestaciones, detectar a tiempo el rastro evidente de su presencia y –en contraposición– los insectos que, de forma habitual, pueden contribuir a contrarrestarlas. Importa apreciar a estos ayudantes naturales, facilitar su proliferación y preservarlos.
Los dos gráficos de esta entrega los traen como en un tablero de antagonistas, dicen “quien se come a quien” en apretado juego por la supervivencia. Y las altas producciones.