El ñame, otro tubérculo que convendría incrementar

El ñame es muy apreciado en la gastronomía por su sabor y riqueza alimenticia. La parte carnosa, un tubérculo, puede tener diferentes tonalidades de blanco, amarillo, púrpura o rosado, y en la piel, desde blancuzco hasta chocolate oscuro. Su textura puede variar de suave y húmedo hasta áspero, seco y arenoso.

La parte superficial de la planta es una enredadera trepadora formada por tallos (bejucos) que pueden alcanzar hasta tres metros, con hojas acorazonadas. Se propaga por trozos, cada uno con dos o tres yemas.

Requiere temperaturas entre 18 y 34 grados centígrados y condiciones de precipitación entre 1 200 y 1 300 milímetros y suelo franco arenoso (más arenoso que arcilloso).

Este tubérculo tiene uso muy amplio en la medicina natural y tradicional, en la cual es indicado, sobre todo, para contrarrestar los dolores neurálgicos y los propios de las embarazadas. Regula el ciclo menstrual debido a que aumenta el nivel de estrógenos en sangre. Contrarresta la menopausia, la tensión muscular y los calambres abdominales.

¿Su cosecha? Entre los siete y 12 meses de plantado.

En Cuba, aunque puede estar presente durante todo el año el ñame prevalece de noviembre a abril; almacenado hasta por tres meses, a la sombra, en lugar seco y fresco.

Forma parte de nuestra cultura culinaria, herencia gastronómica de los esclavos africanos quienes allá lo consumieron siempre en grandes cantidades y casi como su único e imprescindible sustento.

En Filipinas lo cocinan con azúcar, como una mermelada que tiene brillante color violeta. Es muy usado también, en diferentes países, para saborizar helados, leche, tartas, galletas y otras reposterías.

Hay una variedad, el ñame de agua, única especie capaz de prosperar en las anegadizas márgenes del río Orinoco, donde se le conoce como ocumo chino. Manjar de preferencia para los indígenas waraos. Allí lo degusté asado, en forma de grandes galletas, y puedo atestiguar que ganaríamos mucho si a las de nuestro consumo incorporáramos esta forma de preparación ancestral.

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