Cada planta que sembramos requiere nutrientes de preferencia, pero también precisa de otros aunque en menor grado. Por eso, conviene abonar la tierra periódicamente, para reponer aquellos que asimilaron y ahora están en falta.

Con frecuencia la tierra comienza a menguar la frondosidad de las plantas, y en ellas se nota que algo no sucede como debiera. Momento en que debemos reponer los faltantes. La periodicidad, cuando aplicamos fertilizantes naturales, está sobre los 15 días. Un plazo corto, ciertamente, pero no preocupante, si algo sobrara… las plantas son inteligentes, no se indigestan, asimilan lo necesario.
Ilustro a continuación algunas fórmulas que pueden ayudarle en la compensación que usted busca, y que sus plantas demandan.
Si no le bastaran, entonces recomiendo una fórmula completa casera, un verdadero cura-lo-todo en cuanto a faltantes nutricionales: borra de café, cascarones de huevo (molidos) y cáscaras de plátano maduro. Aportan nitrógeno, fósforo y potasio. Puede aplicarlos al natural o disueltos en agua.

