Dos leyendas vivas del béisbol en la Isla, uno lanzador y el otro jardinero, dijeron adiós de manera oficial al deporte activo y no pudo ser de otra manera que en el propio diamante donde tantas veces rubricaron memorables actuaciones que los inmortalizaron en la memoria de los aficionados pineros.
Gervasio Miguel Govín y Yoanis Pérez García, se marchan de la labor activa dejando una impronta que será recordada generación tras generación y que forma parte de la rica historia de la pelota en la Isla.
El primero disputó 22 Series Nacionales, de ellas 20 en la Isla, y se convirtió en uno de los héroes indiscutibles desde el box de la primera gran hazaña de los equipos pineros en Series Nacionales formando junto a Carlos Yanes una dupla temible para los line up adversarios.
Por su parte, el guardabosque también sobrepasó la veintena de contiendas beisboleras (21) y se caracterizó por una defensa hermética, fue dueño de una manera peculiar a la hora de fildear imponiendo así su propio estilo.
Ambos siempre demostraron entrega, disciplina, amor a la camiseta, respeto al público y formaron parte del aquel glorioso conjunto, entonces santanillas y panteras, que por primera vez en la historia clasificó a una post temporada y cayó con las botas puestas contra Industriales en el séptimo desafío de la semifinal occidental, después de eliminar al campeón vigente Pinar del Río.
Al Cristóbal Labra acudieron a reconocer sus trayectorias la máxima dirección del territorio, la Comisión Nacional de la disciplina, la Dirección de Deportes, organismos, entidades, instituciones, organizaciones de masa, familiares, amigos, compañeros y el pueblo pinero.
Ambos, aunque ya no permanezcan durante nueve inning lanzando, fildeando y bateando, continúan muy ligados al deporte que aman y que forma parte indisoluble de sus vidas.