Escuché a un cuentapropista dedicado, principalmente, a la reventa de productos empaquetados: “Nada, subo los precios y que los clientes paguen mi multa”. Acababan de imponerle un correctivo por varias irregularidades en su deficiente gestión mercantil. Error, por esa vía escogida en medio de un ofuscamiento total, se encaminaba a merecer una nueva sanción. […]