Por donde el agua no abunda…

FOTO: Wiltse Javier Peña Hijuelos

La miel sale del sudor campesino, aprenden los integrantes infantiles de este enjambre imaginario

Visitar la Cooperativa de Créditos y Servicios Julio Antonio Mella, reconforta. Allí estuvimos, acompañando a los niños-actores de la Colmenita Sucusuquera, que fueron hasta el lugar para conocer lo que se produce en las inmediaciones del poblado donde iban a actuar un poco más tarde, en el cierre de la Jornada por la Cultura Cubana.

Los atendió Leonardo Montero Lamas, el vicepresidente de esta agrupación, quien explicó que su cooperativa está integrada por 38 socios, muchos de los cuales son parte de los 96 tenentes de tierra que tributan al esfuerzo colectivo.

A la primera interrogante de los niños, Leonardo explicó que, de ese total, componen la fuerza de trabajo 35 mujeres y 103 hombres.

Dijo, además, que están distribuidos según su experiencia o especialidad para atender 2347 hectáreas, de las cuales 1560 están en función de la masa ganadera.

“Nuestra cooperativa aporta cada año sobre los 350 000 litros de la leche que va a ustedes, los niños”,–enfatizó con orgullo, y agregó: Pero no es todo. También contribuimos con 70 toneladas de carne vacuna, y una producción agrícola variada que, en estos momentos, tiene al tomate y los frijoles como producciones principales”.

Sobre los tomates explicó que se trabaja en la siembra de nuevos semilleros y la recuperación de los afectados por la persistencia de las lluvias en los últimos días. “Todos los productores están inmersos en esto –puntualizó– porque el compromiso es poner tomates de consumo en la mesa de la población a partir del 20 de diciembre. Y que el destinado a la industria salga en fecha, entre enero y febrero”.

Los niños preguntaron sobre la próxima cosecha de frijol, y el vicepresidente de la cooperativa explicó que, en esa zona, por ser de tierras afectadas por la sequía, se siembra frijol negro y colorado, los más fuertes o resistentes a la falta de agua. “Por eso, nuestra fecha de arrancada es el diez de noviembre, se logran así los mejores resultados según experiencia de años anteriores.

“En este, enfatizó, el área total que tenemos prevista debe proveer más de 21 toneladas, un aporte sustancial al autosostenimiento del territorio. Y lo estaremos logrando a partir de plaguicidas biológicos, producidos por Labiofam. Nada de productos químicos, un alimento ciento por ciento confiable para el consumo humano”.

He resumido, de forma muy concisa, el intercambio con Leonardo Montero en la cooperativa Julio Antonio Mella. Un encuentro donde los pequeños (y también sus adultos acompañantes) conocimos sus perspectivas inmediatas y el esfuerzo que allí se realiza, en faena diaria, para la alimentación del pueblo.

FOTOS: Wiltse Javier Peña Hijuelos
FOTO: Wiltse Javier Peña Hijuelos

Otros artículos del autor:

Isla de la Juventud
Colaboradores:

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *