Madre de muchos africanos

Foto: Marianela Bretau Cabrera

Idania Domínguez Domínguez es profesora de inglés desde hace 47 años. Llegó a la Isla en 1975 a cumplir el servicio social y aquí echó raíces. Lo que más la enorgullece es la etapa en que trabajó en pos de la educación internacionalista en este terruño.

“Primero trabajé en el pre militar José Carlos Mariátegui y luego me llamaron para incorporarme en la Esbec 26, llamada 25 de Septiembre, de estudiantes mozambicanos, en dos grupos de Preuniversitario. Años más tarde se creó el pre multinacional Andrei Grechko, con alumnos de Ghana, Mozambique, Sudán y de Sao Tomé y Príncipe, y me desempeñé como profesora de Inglés y jefe de Cátedra de idiomas.

“Fue la mejor etapa de mi vida profesional teniendo en cuenta que estos muchachos eran muy disciplinados, responsables, gustaban de las lenguas y me desempeñé allí no solo como maestra sino como madre de muchos, de hecho, le llamaban a mi casa la embajada de África; en ella acostumbraban a pasar los fines de semana, desarrollar sus actividades culturales, hacer comidas típicas.

“Como es lógico, había diferencias entre las nacionalidades, mi labor fundamental fue tratar de que ellos vivieran como una gran familia y esa experiencia la viví como profesora guía de décimo tres.

“En ese grupo logré la unión de las nacionalidades. En mis vacaciones me iba con ellos a los lugares adonde los llevaban. Mientras continuaron estudios y se graduaron de las universidades siguió esa unión y visité en Cienfuegos, Matanzas…

“Estuve trabajando como diez años en esas escuelas. Cuando comencé con ellos como profesora de inglés ya ellos hablaban bien el español, por eso mi primera investigación científica fue el quehacer con la enseñanza de una tercera lengua. Obtuve premios en jornadas pedagógicas e inicié en la vida científica y proseguí en una Maestría.

“Compartía con ellos en las fiestas, aprendí de su cultura culinaria y ellos de la nuestra. Por ejemplo, los ghaneses preparaban una comida llama dasteek, que hervían el frijol, lo sazonaban con una carne y hacían un cocido de garbanzos, pero de frijoles colorados, negros u otro tipo, y eso se quedó de tradición en casa.

“Recuerdo con mucho cariño la celebración de mis 35 años. Fue sorpresivo, ellos me llamaron a la casa el día antes, el ocho de julio, me dijeron que Ana, una estudiante que padecía de una gran alergia, estaba enferma, no le hacía caso a la enfermera y necesitaban mi presencia. Salí con mi hijo y mi esposo para la escuela y cuando llegué era una fiesta sorpresa por mi cumpleaños.

“Esa etapa fue la de los mozambicanos, prepararon la fiesta con sus boliños como decían ellos y sus actividades típicas, danza makoaela, y todos se unieron para que la ‘Mama’, como ellos me decían, estuviera contenta”, relata Idania sin evitar sonreír…

“Otra anécdota muy linda fue la celebración de los 20 años de Brijht Docse, un ghanés hijo del rey de Ghana. El festejo de esa edad en ese país es muy importante y él se sentía mal emocionalmente porque no iba a tener sus padres para la fecha. Entonces fuimos junto con Hugo Roque y Fredy Manso, unos estudiantes ghaneses, para que nos dijeran lo que se hacía y así lo celebramos en mi casa. Él cumple años el primero de marzo y hasta hoy recuerda el festejo que le hicimos, pues adornamos y se vistieron con trajes tradicionales.

“Así también sucedió con la graduación de los primeros mozambicanos de 12 grado, se hizo una fiesta en casa, incluso, Brijht Docse y Pablo Azevedo (de Mozambique) tenían llave de mi hogar, tenían su cama y mi casa era como la de ellos.

“Pablo ha venido en tres ocasiones en los últimos años y acostumbran a ir a lo que queda de la Esbec 26, siempre van, como si le rindieran tributo a un lugar sagrado.

Los acompañamos y van adonde estaba su cama…

“Ah, mire, una cosa bonita sucedió: ‘Cuando este muchacho, Pablo Azevedo, se graduó de técnico medio de Construcción Civil aquí en la Isla, no encontró trabajo en Mozambique, empezó a andar el mundo y creo que es una experiencia grande que llegara a Inglaterra, quiso continuar estudios de Construcción Civil y él siendo un técnico medio graduado en Cuba, después de aprender bien el inglés, entró directo al tercer año de Ingeniería Civil en Inglaterra y hoy trabaja en el Colegio de Ingeniería Civil en Londres’”.

En los ojos de Idania se puede contemplar el orgullo de haber sido parte de una experiencia maravillosa compartida por muchos.

“Fue muy triste cuando ellos se fueron –subraya–. En 1993 pasé a la enseñanza universitaria, me jubilé y reincorporé en la Facultad de Ciencias Médicas, donde todavía me desempeño”.

Su apartamento en el Panel II, en La Fe, ya no se ve repleto de estudiantes de distintas nacionalidades compartiendo como familia, mas el vínculo prosigue mediante las redes sociales y el retorno de muchos a lo que llaman su hogar, porque Idania sigue siendo la ‘Mama’ y su casa la embajada de África en esta Isla.

Otros artículos del autor:

    None Found

El Pinero El Pinero 2022 Suplementos
Colaboradores:

One Reply to “Madre de muchos africanos

  1. Muy agradecida con el articulo que escribiera la periodista Marianela sobre mi persona como educadora de estudiantes extranjeros en esta isla

Responder a Idania Antonia Dominguez Dominguez Cancelar respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *