Cambios que irritan

En los tiempos que corren, llenos de carencias de todo tipo, a pesar del esfuerzo del país por salir adelante resulta imprescindible que las entidades a la hora de hacer cambios en la prestación de los servicios a la población tengan en cuenta esta realidad.

Se trata de buscar las mejores variantes que lejos de agravar la situación a la hora de comprar los alimentos y otros artículos imprescindibles para la vida cotidiana sean más sencillas y eficientes.

Voy a referirme a lo acontecido en el punto de venta del Panel II, perteneciente a la cadena TRD, cuya medida adoptada propició la irritación de los clientes al ver ralentizada la adquisición de sus productos.

Esto se debió a que ahora los dependientes tienen que también anotar en el torpedo, vender la mercancía y por supuesto cobrarla, aun cuando existe un representante de la bodega para hacer esa misma función.

Será necesario tal nivel de burocratismo que algunos, erróneamente, quieren llamar control, si se tiene en cuenta que ya existe una tarjeta con ese propósito, además de la libreta de abastecimiento.

Si a esto le sumamos que ese punto –como casi todos– carece de las condiciones mínimas indispensables para brindar un servicio de calidad, léase las personas debajo del fuerte sol o a expensas de la lluvia, entre otras situaciones desfavorables; resultaría beneficioso a la hora de tomar decisiones, hacer primero un análisis en el terreno y después accionar, teniendo siempre presente el eslogan de que mi trabajo es usted.

No se puede manchar con estas maneras de actuar el esfuerzo que realiza la máxima dirección de la nación en los distintos ámbitos, las noticias son harto elocuentes y se informan todos los días, para revertir la situación económica prevaleciente.

Aunque algunos incrédulos lo desestimen, reitero la perversidad del bloqueo yanqui, causante en un porciento elevado de las dificultades presentes, al tener el país que buscar socios comerciales lejanos, encarecedores de los costos, cuando existe un mercado natural a solo 90 millas.

Son tiempos, como decía Martí, de haber aprendido antes, aunque el mundo cambiante que nos ha tocado vivir hace prioritario emplear la experiencia acumulada, la búsqueda de iniciativas creadoras y sobre todo mucha responsabilidad, para lejos de avivar tensiones, disminuirlas.

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Isla de la Juventud Opinión
Pedro Blanco Oliva
Pedro Blanco Oliva

Licenciado en Literatura y Español en la universidad Carlos Manuel de Céspedes, Isla de la Juventud. Diplomado en Periodismo con más de 40 años en la profesión

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3 Replies to “Cambios que irritan

  1. A esto se le suma la constante pregunta de los usuarios del por qué estas ventas no se realizan en la misma bodega, ni que estas estuvieran abarrotadas de productos, los trabajadores de las mismas se pasan el día mirándose la cara y subutilizados. Por ejemplo en los casos de la bodega de la Paloma con su población envejecida tiene que trasladarse desde calle 22 esquina 45 hacia Cubalse y los de la Bodega del El Cauto que deben trasladarse a comprar estos productos hacia el mercado de Abelsantamaría, ah y trasladar también a una de sus dependientas la cual es la encargada de apuntar en la tan famosa libretilla que lo que ha causado es otra demora. Es ganas de complicarlo todo y hacer pasar trabajo a la población la cuál ya se encuentra saturada y sí es cuando le dan por vender el mismo producto a dos o tres bodegas a la vez …teniendo para esto toda una semana o un mes….nos quedamos sin palabras.

  2. Muy buena y oportuna tus observaciones. Creo que también se debió buscar un lugar más idóneo y no tan lejos del lugar donde se expendían los artículos y mercancías anteriormente. Creo que no se analizó con profundidad la alta incidencia de personas de la tercera edad y enfermos que compran en el Bodegón y ahora tienen que caminar una distancia mucho mayor para adquirirlos en condiciones adversas.

  3. Excelente comentario, si el mecanismo esta establecido por el gobierno municipal, porque hacen lo que le venga en ganas, eso no es culpa del bloqueo.

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