
El hogar de antaño les dio la bienvenida. Las paredes se ensancharon para el abrazo cariñoso; los pasillos, aquellos largos pasillos por los que tanto caminaron hacia las aulas o los dormitorios, volvieron a revivirles los recuerdos, y la plaza… los devolvió a las edades juveniles.
La sensación de volver a estar en casa, esa fue la que sintieron en el alma los exbecarios nicaragüenses que visitan la Isla de la Juventud desde ayer nueve de octubre para participar en la celebración por el aniversario 45 de la educación internacionalista, cuando pisaron su escuela, la ESBEC Carlos Fonseca Amador.
Ya el edificio no es el mismo, desde hace unos años sirve de viviendas a varias familias, mas su esencia de centro escolar y hogar permanece impregnada en el aire que allí se respira.

La emoción casi no le permitió pronunciar palabras a Mercedes Arquín Laynes, volver por tercera ocasión fue para ella tan gratificante como la primera vez en el 2015. Con la voz entrecortada solo alcanzó a decir ante sus coterráneos, profesores y vecinos de la comunidad:
“Lo que soy, lo que tengo se lo debo al Comandante Fidel Castro y al pueblo cubano que en medio de sus limitaciones nos han dado todo su apoyo y amor”.
Números culturales a cargo de los pioneros de la comunidad, las palabras de bienvenida de la instructora de arte Yaima Montenegro Ramírez y la develación del busto del líder del Frente Sandinista de Liberación Nacional, Carlos Fonseca Amador fueron las principales acciones realizadas por los visitantes.
Guillermo Toranzo Batista, quien laboró en el centro por unos nueve años, dijo en el pequeño acto.

“Llegué a esta instalación cuando era una escuela secundaria básica en el campo de estudiantes extranjeros en diciembre de 1980. Para nosotros los que trabajamos tantos años aquí, los que empezaron antes y para los que llegaron después, la escuela siempre fue una enseñanza porque además de permitirnos aprender de otras nacionalidades, nos conectó con la Latinoamérica esa que no siempre veíamos cercana. A nombre de los profesores queremos agradecerles a los nicaragüenses que hoy nos acompañan”.
Con la presencia de exbecarios de varias naciones el Municipio Especial conmemora por estos días los 45 años de su contribución a la formación y al futuro desarrollo de los pueblos de África y de América Latina, un proyecto social con notable impacto en la vida de esos profesionales que en la actualidad hacen posible el desarrollo de sus países.

Pues la verdad que para mí fue gratificante el hecho de la celebración de los 45 años me recuerda la algarabía que formábamos todos cuando celebrábamos algún acontecimiento importante me impactó sí la situación física de nuestra escuela sin embargo ya el profesor Toranzo me explicó las razones y le agradezco infinitamente sus comentarios por que lloré al verla así para mí lo importante es que está siendo utilizada por gente necesita de un albergue
Que gratificante recordatorio, yo también estuve ahí en la isla y no pierdo la esperanza de un día llegar ahí de nuevo con mis hermanos los cubanos.