El gimnasio biosaludable perteneciente al combinado deportivo Irene Hernández, en Sierra Caballos, goza de muy buena demanda por sus variados aparatos y según el criterio de los pobladores de la comunidad ha cumplido su objetivo, pero el deterioro por el paso del tiempo y estar expuesto al sol y sereno es eminente. Dicha razón lo hace inutilizable y hasta riesgoso debido al herrumbre y las partes filosas en algunas piezas de metal. Tales condiciones lo hacen peligroso, principalmente para los más chicos, quienes no reparan en los accidentes que pueden ocurrir al jugar en esas instalaciones. Urge entonces que la entidad correspondiente adopte las medidas pertinentes para evitar males mayores y dar solución definitiva al área, quizá con mantenimiento a los equipos recuperables, reparaciones u otras alternativas.
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