Los familiares de combatientes muertos en misiones internacionalistas reciben muestras de cariño y compromiso
Los combatientes cubanos muertos en misiones internacionalistas fueron recordados este domingo en la capital de la Isla de la Juventud con una marcha cargada de emoción y compromiso similar al patentizado 36 años atrás, durante la Operación Tributo cuando llegaron a la patria los restos mortales de esos héroes.
Los principales dirigentes políticos y del gobierno del ultramarino municipio especial cubano encabezaron la peregrinación desde el parque Camilo Cienfuegos hasta el Panteón de los Caídos por la Defensa en el cementerio de Nueva Gerona, donde se evocó además el aniversario 129 de la caída en combate del Lugarteniente General del Ejército Libertador Antonio Maceo Grajales y de su ayudante el capitán Francisco (Panchito) Gómez Toro el 7 de diciembre de 1896.
En presencia de madres, padres, hijos y demás familiares de los caídos, oficiales y sargentos de las Fuerzas Armadas Revolucionarias y otros colocaron ofrendas florales y rindieron honores militares en la solemne ceremonia realizada en horas de la mañana, donde también recordaron el aniversario 32 de la fundación de la Asociación de Combatientes de la Revolución Cubana, cuyos miembros defienden incondicionalmente la Revolución y las conquistas del socialismo en todos los ámbitos.
Al concluir la tradicional ceremonia y tras la colocación de flores ante los nichos, los familiares de los caídos recibieron cálidas muestras de respeto y cariño del pueblo, fundamentalmente de estudiantes y jóvenes.
Rafael Ernesto Licea Mojena, primer secretario del Partido aquí, recordó la contribución desinteresada de los cubanos a la libertad de naciones africanas y de otras latitudes, y afirmó que no olvidamos jamás a quienes dieron su vida por las justas causas de otros pueblos siguiendo los ejemplos de Antonio Maceo, de Ernesto Guevara, de Fidel y otros que se consagraron a lograr los objetivos propuestos frente al imperialismo, nuestro enemigo histórico, en cualquiera de las trincheras impuestas por la lucha.
Rememoró aquel siete de diciembre de 1989 en que culminó la Operación Tributo, iniciada con la inhumación de los más de los dos mil combatientes cubanos caídos en misiones internacionalistas en África, en el suelo sagrado que los vio nacer y esperó con sentimiento, entre ellos 24 pineros que ofrendaron sus vidas.
El también diputado a la Asamblea Nacional del Poder Popular, significó que nada hará detener nuestra voluntad de lucha ni rendirnos ante las mayores amenazas del enemigo, por eso, enfatizó, seguimos de pie y combatiendo, con la fuerza de la unidad y las motivaciones por el legado de quienes nos antecedieron.
En la despedida de duelo en el Cacahual, en aquel 1989, Fidel explicó: “(…) la fecha del siete de diciembre se convertirá en día de recordación para todos los cubanos que dieron su vida no solo en la defensa de su Patria, sino también de la humanidad. Así el patriotismo y el internacionalismo, dos de los más hermosos valores que ha sido capaz de crear el hombre, se unirán para siempre en la historia de Cuba (…)”.
