
El presidente de la Federación Cubana de Fútbol, Oliet Rodríguez Méndez, realizó este domingo una visita de trabajo al territorio, con el objetivo de certificar el terreno, transporte, hospedaje y demás aseguramientos para el Campeonato Nacional de Fútbol de la primera categoría, que arrancará el venidero cinco de febrero en ocho canchas del país.
Tras una interrupción de dos años provocada por la situación sanitaria que ha atravesado el país, vuelve para beneplácito de la creciente afición del deporte de las multitudes, una justa que pretende convertirse en el segundo espectáculo deportivo más importante del Mayor de los Archipiélagos.
En su recorrido por la Isla el titular de esta disciplina en Cuba, ratificó la importancia para el desarrollo del balompié que la inminente justa llegue a las 15 provincias del país y el Municipio Especial y ponderó que a pesar de la dificultad que constituye para el resto de los equipos el traslado hacia el territorio, este no será una limitante para que los pineros disfruten del certamen nacional.
Visitó la cancha El Rodeo, cuartel general del once pinero, y aunque alabó que se mantiene en buenas condiciones, señaló la escasez de césped en algunos sectores del campo y la inejecución del relleno y pasto vegetal proyectado desde el 2019, como una deuda pendiente.

El cercado perimetral, hoy con alambre de púas, también precisa fortalecerse con un material más idóneo a esta actividad, pues con el actual cercado está latente el riesgo de que se dañen los balones.
“Aspiramos a lograr una instalación de calidad –explicó Rodríguez Méndez– convertir los terrenos en estadios de fútbol con los elementos básicos, camerinos, bancos y canchas en buen estado para dar a los protagonistas las mejores condiciones.
“Debemos potenciar la cultura del detalle, engalanarlo todo, retocar la pintura con los colores que identifican al equipo, colocar el logotipo que representa a la escuadra en un lugar visible, las porterías pintadas y con angulares detrás para que luzcan de calidad, colocar el podio del balón para la entrada de los árbitros, desfilar con los niños de la comunidad, hacer todo desde el primero hasta el último día del torneo aunque los resultados no sean favorables, porque esta tiene que ser una fiesta para el pueblo”.
A pesar de que certificó la condición de listos para la competición, reiteró a la familia del fútbol pinero que no deben permanecer conformes, es necesario continuar desarrollando acciones por etapas desde la concepción de que todo cuanto se haga, poco a poco, la cancha lo agradecerá.
La selección de la Isla debutará el propio día cinco de febrero en calidad de visitante, en la difícil plaza de Zulueta enfrentando a Villa Clara, uno de los onces tradicionales de Cuba. Luego del duelo frente a los villaclareños, los nuestros regresarán a su feudo para recibir al plantel de Matanzas.