El fuerte sacudón que dio el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, a Antony Blinken, debería servir de escarmiento al injerencismo del Departamento de Estado de Estados Unidos que encabeza.
El fuerte sacudón que dio el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, a Antony Blinken, debería servir de escarmiento al injerencismo del Departamento de Estado de Estados Unidos que encabeza.