
Pineros de varias generaciones rememoraron este jueves 13 de octubre en el Monumento Nacional y Museo de la Finca El Abra la llegada del joven José Martía esta segunda ínsula cubana.
Desde la poesía, la música y la danza se evocó su pensamiento y accióna 152 años de su estancia en el hoy Monumento Nacional donde más de un siglo y medio atrás fuera acogido por la familia SardáValdés.
De Martí, que como bien dijera Celia Hardy, directora del Centro Municipal de Patrimonio Cultural, llegó a El Abra después de atravesar los tormentos del presidio, se exaltó su amor al suelo patrio y antiimperialismo. De igual forma se destacó su humanismo al recordar que trabajó siempre por el enaltecimiento del hombre pues quería que fuera libre de prejuicios, de claro pensamiento, trabajador, honrado y culto.
Se reunieron en el sacro lugar para rememorar el trascendental acontecimiento la máxima dirección del Partido, representantes del Gobierno, de las filiales de la Unión de Historiadores de Cuba, la Unión de Escritores y Artistas de Cuba, integrables de la Sociedad Cultural José Martí, de varios sectores de la sociedad pinera y cuadros de organizaciones políticas y de masas. También la delegación de exbecarios que festejan en el Municipio el aniversario 45 de la educación internacionalista.
En sus palabras Hardy alertó además en los tiempos que corren donde se suceden intentos desestabilizadores y campañas en redes sociales la urgencia de:… “·salvar la unidad de la patria y de todos sus hijos. En momentos como estos las ideas de Martí rebrotan para despejar incógnitas y marcar con su raigambre mambisa el camino a seguir, para que a dignidad plena del ser humano jamás deje de ser nuestra ley primera”.
