Conscientes de que sembrar árboles es una de las mejores formas de reducir o compensar la huella de carbono, debido a su capacidad para absorber CO2, los participantes del Isla Verde 2025, el único Festival Internacional de Cine y Medioambiente del área Caribe, realizaron en la jornada final una gran siembra de pino y roble.

Como ya se ha hecho tradición volvieron al Pinar del Cine, ubicado en una parte de la autopista que lleva al poblado La Fe, el segundo en importancia del territorio, para con esa acción compensar la huella que deja el evento, este año muy superior en el número de personas que asiste y la cantidad de propuestas desarrolladas, y continuar poblando la Isla de la Juventud.
Osiris Martínez Oropesa, director de la Empresa Forestal Isla de la Juventud, dijo en entrevista:
“La plantación fue de aproximadamente mil posturas de pinos y cuatrocientas de roble. Al terminar de plantar llegamos a las cuatro hectáreas aproximadamente, que digamos a un marco de plantación de 2 500 por hectáreas es una cifra que para nosotros a lo mejor no sea muy representativa, pero sí resulta significativa para el municipio porque siempre es bienvenido el poder plantar.

“Como Festival de Cine creo que es un gran aporte e iniciativa de los organizadores y participantes. Ellos planteaban que consumían una cantidad de oxígeno y que querían revertirlo a través de la siembra, que lo cubriera”.
El ingeniero explicó, además, que después de la plantación se le realizó un mantenimiento, con un ruedo alrededor de la planta, chapea del área y un arrope con la hierba que se le quite para que cuando llueva, conserve la humedad.
Hermosa la vista de personas codo a codo en contacto con la naturaleza y haciendo algo fructífero por ella.

Reconocidas figuras del cine, la ciencia, ambientalistas y pobladores protagonizaron la acción que casi cierra esta tercera edición del Festival.
La ecuatoriana Camila Ávila, estudiante de la Escuela Internacional de Cine y Televisión de San Antonio de los Baños, es la primera vez que participa en el evento.
“Nunca había plantado, pensé que sería más difícil y no lo es. Me gustó estar aquí, sentir la tierra, también la energía de la gente; cada quien cogió su ritmo y supo lo que tiene que hacer. Fue como una danza.
“Hemos venido para hacer un registro del Festival, me parece muy interesante toda la información que gracias al cine, los reportajes, documentales… estamos recibiendo porque aprendemos lo que sucede en el mundo con el tema y eso es importante, y también siempre he creído que el arte está ligado al medioambiente, lo político… Creo que es muy lindo y acertado el Festival”.
Los árboles ayudan a combatir el cambio climático y siendo el Isla Verde una plataforma que apuesta por el hacer más en función del cuidado y preservación de la naturaleza, por eso esta actividad al final.
Desde las 5:30 de la tarde con la inauguración de la segunda parte de la muestra de arte contemporáneo De la Isla a la luna 20. en el Conjunto Monumental Presidio Modelo y luego las presentaciones del joven malagueño Samuel Sarrión, Desmenlenao, y del cantautor cubano Kelvis Ochoa, culmina el Festival, que este año volvió a convertirse en suceso de todas las artes desde la defensa del entorno y la vida.








