
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, anunció este domingo una ampliación de las operaciones militares en la ciudad de Gaza y sus alrededores, con el objetivo declarado de tomar esta urbe del norte de la franja de Gaza.
Netanyahu indicó que unos 100 mil habitantes ya han abandonado esta ciudad, la principal del enclave palestino. Según estimaciones recientes de la Organización de Naciones Unidas (ONU), cerca de un millón de personas viven allí y en sus alrededores.
El ejército israelí afirma controlar 40 por ciento de la aglomeración, que presenta como el último gran bastión del movimiento islamita palestino Hamas en la franja de Gaza, devastada por 23 meses de guerra. El conflicto fue desencadenado por un ataque sin precedentes de Hamas contra Israel el 7 de octubre de 2023.
“Estamos ampliando nuestras operaciones en la ciudad de Gaza y sus alrededores”, declaró Netanyahu ante sus ministros al inicio de una reunión semanal del gobierno, según un video difundido por su oficina.
“Estamos destruyendo las infraestructuras terroristas, demoliendo las torres identificadas como utilizadas para el terrorismo”, añadió.
Ni el ejército ni el gobierno de Netanyahu han anunciado oficialmente el inicio de la ofensiva a gran escala en Ciudad de Gaza, aprobada en agosto.
Sin embargo, en las últimas semanas, el ejército ha intensificado sus bombardeos y sus operaciones terrestres en la ciudad y sus alrededores.
El viernes y el sábado, tras comminar a los residentes para que fueran evacuadas, las fuerzas israelíes destruyeron dos torres de viviendas.
Israel acusa a Hamas de utilizar estas infraestructuras para sus operaciones, algo que el movimiento palestino considera “mentiras descaradas”.
Se ordenó a la población evacuar a una “zona humanitaria” en Al Mawasi, al sur, que según Israel cuenta con “infraestructuras humanitarias” y está abastecida de alimentos y medicamentos.
“Hemos establecido otra zona humanitaria para permitir que la población civil de Gaza se desplace a una zona segura y reciba allí ayuda humanitaria”, señaló Netanyahu.
El primer ministro acusó a Hamas de impedir las evacuaciones y de utilizar a los civiles como “escudos humanos”, acusaciones que el movimiento islamita ha rechazado desde el comienzo de la guerra.
Trasladado a Al Mawasi con su familia, Basam al Astal, de 52 años, afirma que la zona “no es ni humanitaria ni segura”. “No hay sitio para carpas, no hay servicios humanitarios, no hay agua, no hay saneamiento, no hay ayuda alimentaria”, dijo.
Además, el ejército ha llevado a cabo a menudo ataques mortales contra Al Mawasi, alegando que su objetivo son los combatientes de Hamas, movimiento que tomó el poder tras ganar las elecciones en Gaza en 2007.
El gobierno de Netanyahu afirma que quiere destruir Hamas, liberar a los rehenes secuestrados durante el ataque del 7 de octubre y tomar el control de la seguridad de todo el territorio palestino, situado en la frontera sur de Israel.
Al menos 64 mil 368 palestinos han sido asesinados, en su mayoría mujeres y niños, y otros 162 mil 776 resultaron heridos desde que Israel comenzó su ofensiva en octubre de 2023.
Otros artículos del autor:
- Hamás rechaza acusaciones de EE.UU. y reafirma compromiso con las negociaciones
- Israel toma la decisión de ocupar toda la Franja de Gaza
- Más de 100 ONG advierten de “hambruna masiva” en Gaza
- Israel destruyó más de 500 escuelas en Gaza
- Gaza: Más de 70 mártires por masacres israelíes y cuatro fallecidos por hambruna en un día