
¡La Isla parió un festival! Sentenció Jorge Perugorría parafraseando al cantautor Silvio Rodríguez y una estruendosa ovación inundó el cine Caribe. Sí, la Isla de la Juventud ya tiene su festival, Cuba ya tiene un festival con el que desde la creación cinematográfica contribuirá, desde ahora y en el futuro, a la preservación del medio ambiente.
Lo vivido en la noche de este 31 de mayo en la inauguración oficial de la primera edición del ISLA VERDE Festival Internacional de Cine y Medio Ambiente del Caribe fue un verdadero lujazo para los presentes: pineros de todas las edades, actores, directores, medioambientalistas, patrocinadores y organizadores; el ser partícipes de tan extraordinario acto de amor por la vida y la naturaleza los compromete a convertir a este territorio en referente de conservación del medio ambiente en el área del Caribe y el mundo.
Momento muy especial de la gala inaugural lo constituyó la entrega del premio ISLA VERDE de honor a personalidades con un notable aporte a la protección de la madre natura. De manera póstuma el galardón le fue concedido al abuelo del rap y director del proyecto Cubanos en la red, Osmel Francis, artista y pionero en la concientización de la problemática medioambiental, y fue su hermana Odalis Francis quien lo recibió.

A quien desde ya es considerada la madrina del festival y desde su sapiencia ha contribuido a su realización, la mexicana Eleonora Insunza, directora de Cinema Planeta y presidenta del Comité Ejecutivo de la Green Film Network Red de Festivales Internacionales sobre Medio Ambiente que incluye más de 33 eventos del orbe, también se le entregó el premio junto a un reconocimiento del Comité Organizador una obra del artista de la plástica Gustavo César Echevarría.
“El festival que se inaugura hoy va a ser el único indispensable en Cuba. Habrá muchos otros, pero este es indispensable, urgente y está en la Isla de la Juventud. Ahora entiendo por qué es el único lugar donde podía estar. Aquí en esta Isla me iba a encontrar cotorras, mangles, pinos, bellezas increíbles, pero también mucha gente con corazón y valor, así que este es el lugar perfecto”, declaró.
ISLA VERDE homenajea con una muestra retrospectiva de su obra al cineasta galésYann Arthus−Bertrand, fundador de Good Planet,
activista medioambiental y fotógrafo francés a quien en la persona del director de cine Arturo Soto le fue entregado el galardón.
En su primera versión el festival no es competitivo y comprende en su bien nutrido programa el estreno de 15 cintas, talleres, conversatorios, acciones educativas medioambientales, conciertos, entre otras propuestas.
Jorge Perugorría, su presidente, en las palabras inaugurales convidó a los habitantes del Municipio a ser los protagonistas del sueño convertido en realidad, exaltó los valores naturales y potencialidades del territorio, razones por las cuales fue escogido como sede del evento y expresó:
“Más que un festival es un proyecto en el que queremos acompañar tanto al Gobierno de la Isla como a los pineros en su desarrollo sostenible; tenemos la visión de que ese desarrollo no solo va a permitir la conservación de ese gran tesoro que es parte de su mística, La Isla del Tesoro, el gran tesoro que tiene hoy es su naturaleza y su gente y esa combinación es maravillosa”.
Al dejar declarado de forma oficial el ISLA VERDE comienza verdaderamente la labor mancomunada porque este paraíso, como lo llamó también el actor, documentalista y artista de la plástica, sea ejemplo en el desarrollo del turismo sostenible y alcance la soberanía energética y alimentaria.
Con los parabienes de representantes de comunidades originarias de la región inició este sueño esperanzador; desde este pequeño terruño ya brota una luz en favor de la salvaguarda de la biodiversidad y todo lo bello que rodea al ser humano, un destello por la existencia de las futuras generaciones, en fin, por la vida. ¡Larga vida al festival! ¡Larga vida ISLA VERDE!