Resaltó Rafael Ernesto Licea Mojena, primer secretario del Comité Municipal del PCC en el acto por el aniversario 67 del triunfo de la revolución, celebrado en la plaza Memorial el Pinero este 24 de diciembre.

¡PINEROS!
Una vez más la patria nos convoca de cara al aniversario 67 del Triunfo de la Revolución, y aquí estamos prestos para servirla. Es precisamente esa disposición incondicional lo que ella nos reclama, porque como nos advirtiera nuestro José Martí: “La patria es ara, no pedestal”.
En la patria nacimos, en la patria nos educamos y crecimos, ahora, para la patria vivimos como ella necesita: consagrados y unidos.
Hoy evocamos al invicto líder histórico de la Revolución cubana que desafió a la tiranía, asaltó la segunda fortaleza militar de entonces, cumplió una activa y fecunda prisión en esta Isla enarbolando las ideas revolucionarias y la razón; partió al exilio, organizó la expedición del Granma, tomó la Sierra Maestra como gran cuartel de la guerrilla e hizo añicos la tiranía que ahogaba a este pueblo y cobraba la vida de más de 20 mil de sus hijos.
¡Triunfó la Revolución!, que toda Cuba festejó acompañando a la Caravana de la Libertad dándole triunfal bienvenida.
La otrora Isla de Pinos no quedó aislada en ese empeño libertario, también el pueblo pinero salió a las calles para festejar el triunfo, y dirigirse a Presidio donde se encontraban cientos de jóvenes revolucionarios encarcelados por haber luchado por la independencia total de los cubanos, con el fin de obligar a los jefes, soldados y vigilantes a liberarlos.
Los presos se amotinaron apoyando la victoria y liderados por integrantes del Movimiento 26 de Julio, ellos también exigían su liberación.
Las mujeres también dieron el paso al frente y cuidaron de las principales instalaciones a proteger ante el hecho y el movimiento 26 de Julio aquí, encaminó su actuación para tomar el poder político, neutralizar a la lacra que señoreaba en la Isla y hacer cumplir las medidas revolucionarias.
El propio Primero de Enero las fuerzas revolucionarias habían tomado el poder y ocupado las principales instalaciones incluyendo la estación radial La Voz de Isla de Pinos que también sirvió para orientar a los pineros y crear confianza en la Revolución naciente y que el pasado 15 de diciembre cumplió 67 años.
NO HEMOS ESTADO DETENIDOS Y SÍ TRABAJANDO, CREANDO Y DESAFIANDO ADVERSIDADES
Fueron jornadas gloriosas por y para la Revolución, por y para la Patria, como también son gloriosas las jornadas de hoy en que la seguimos defendiendo desde el corazón y los sentimientos, desde el imperecedero ejemplo e ideas fecundadas por Fidel, del que este año servirá de guía y motivación en el Centenario de su natalicio.
Culminamos un 2025 colmado de desafíos y también de realizaciones concretas de que no hemos estado detenidos y sí trabajando, creando y desafiando adversidades para salir adelante. Varias motivaciones sirvieron de acicate como el centenario del Tratado Hay Quesada, el 70 aniversario de la excarcelación de los Moncadistas de Presidio y el cumpleaños 195 de la ciudad Nueva Gerona, conmemoraciones que también han demandado del esfuerzo decisivo del pueblo y creado un ambiente de unidad e intercambio en favor de la historia, las tradiciones y la Cultura.
También ha sido un año marcado por el recrudecimiento del bloqueo y la reinclusión de Cuba en la espuria lista de países patrocinadores del terrorismo que tanto daña a la nación, limita el desarrollo y sataniza la existencia de nuestra Revolución en un contexto latinoamericano adverso por la política injerencista, desafiante y de vuelta al a la Doctrina Monroe, con la piratería y el fascismo como complementos distintivos, que ha desplegado la Administración Trump en esta nueva ocupación de la Oficina Oval.
La votación de la Resolución cubana contra el bloqueo en Naciones Unidas, fue expresión de que, a pesar de la política desestabilizadora emprendida por el imperio, el mundo en su gran mayoría, apoya la verdad, la condena, y se solidariza con Cuba y su Revolución.
Incontables muestras de apoyo desde todos los continentes emergieron con las ayudas solidarias para mitigar los daños causados por el huracán Melissa y otros eventos hidrometeorológicos que han afectado a la nación.
Para los cubanos, en esta situación excepcional, de economía de guerra, de país asediado y agredido por el imperio más grande y poderoso de la historia por más de 60 años, es demostrativo de que solo un pueblo con la altura y los valores creados como el nuestro, puede dar fe de supervivencia y combate cotidiano de frente a la vida y abrazado a la defensa de su Revolución.
Somos herederos de varias generaciones de cubanos que entregaron sus vidas por ver próspera y libre a la patria, y compartimos deberes con esa vibrante generación del Centenario del natalicio del Apóstol que lo entregó todo y aún el General de Ejército Raúl Castro, Líder al frente de la Revolución cubana, con los comandantes Ramiro y Guillermo, junto a Machado, continúan compartiendo la trinchera en esta difícil batalla del honor y la justicia.
ES NECESARIO ADOPTAR MEDIDAS OSADAS, VALIENTES, BIEN COMUNICADAS, PARA QUE EL PUEBLO LAS ENTIENDA, LAS ACOMPAÑE

Con la certeza de que las mejores soluciones siempre nacen de la participación y la construcción colectiva, se viene desarrollando un proceso necesario en manos del pueblo, instituciones y expertos, que viene aportando frutos con el análisis y propuestas al Programa de Gobierno para corregir distorsiones y reimpulsar la economía, en los que han quedado evidentes, que las medidas financieras no resuelven por sí solas los problemas; los problemas hay que resolverlos trabajando, produciendo, exportando, de manera que permitirán crear las condiciones para, poco a poco, irnos recuperando como territorio y como país.
Corregir distorsiones y reimpulsar la economía no puede ser un eslogan, es una batalla concreta por la estabilidad de la vida cotidiana, porque el salario alcance, porque no falte el alimento en la mesa, porque se acaben los apagones, porque se reanime el transporte, porque la escuela, el hospital y los servicios básicos funcionen con la calidad que merecemos y por lo cual trabajamos.
Para ello también es necesario adoptar medidas osadas, valientes, bien comunicadas, para que el pueblo las entienda, las acompañe; también para que los directivos y empresarios las sepan aprovechar, porque la inflación se mantiene bien elevada, la economía territorial no alcanza los niveles esperados, la generación eléctrica se ha tornado bastante crítica, principalmente en el segundo semestre, a pesar de los ingentes esfuerzos realizados por los trabajadores eléctricos para resarcir los daños de las máquinas generadoras, ya obsoletas y con poco mantenimiento por falta de piezas y financiamiento.
También los precios se mantienen altos, se incumplen las entregas de los alimentos normados, las producciones agropecuarias y de la industria alimentaria no satisfacen las necesidades de los pineros.
Ante este entramado de fuertes problemáticas, indudablemente muy difíciles, se demanda la intervención oportuna y sistemática de los dirigentes y cuadros para intercambiar con la población los principales problemas, evaluando decisiones y perspectivas, hecho que ratifica el reconocimiento a la autoridad de nuestras instituciones y, en particular, a los cuadros del Partido y el Gobierno. Nada sustituye la presencia de los cuadros en su comunicación con el pueblo y los trabajadores, para que se sientan oídos y acompañados y emprendamos así, juntos, las tareas. Generando la confianza de nuestro pueblo hacia el Partido, el Gobierno y nuestras instituciones, dando respuestas positivas a sus principales problemáticas.
NUESTRA ACTITUD REVOLUCIONARIA SIEMPRE SERÁ ACTUAR Y HACERLO MOVILIZANDO AL PUEBLO

En estas circunstancias apelamos al razonamiento de nuestro Primer Secretario del Comité Central del Partido en el XI Pleno, y cito: “…hacer, actuar, transformar. Plan contra plan, diría Martí. Y también Fidel, quien nos convocó claramente a ‘…emanciparnos por nosotros mismos y con nuestros propios esfuerzos…’, desafiando poderosas fuerzas dominantes dentro y fuera del ámbito social y nacional, defendiendo valores en los que se cree al precio de cualquier sacrificio”.
Nuestra actitud revolucionaria siempre será actuar y hacerlo movilizando al pueblo y utilizando su insustituible talento con claridad para echar adelante las tareas demandas por el territorio con el aprovechamiento máximo de los bien escasos recursos de que disponemos, y de este modo, buscar alternativas locales que lleven a vías de hecho el alcance de nuestros objetivos.
En este entramado de dificultades, siempre hay colectivos que se destacan por su talento y esfuerzo, por su nivel de resiliencia para imponerse a la adversidad y salir adelante, como lo han hecho los campesinos, los educadores, los trabajadores de la salud, la cultura y el deporte, como se han alzado los marmoleros y comunicadores, que, en armonioso hacer, han traído sonrisas a los pineros.
El 2026 será también un año de múltiples desafíos porque el panorama internacional se mantiene adverso para la nación, y habrá que hacer ingentes esfuerzos para salir adelante en las producciones, aprovechar al máximo los recursos, y saltar el bloqueo, una y otra vez.
Para ello será necesario abrazar con toda la fuerza el Concepto de Revolución, y “cambiar todo lo que deba ser cambiado; pensar y actuar diferente a como lo hemos hecho hasta aquí.
La tarea es combinar el rigor económico con justicia social, y esa combinación solo la puede garantizar esta Revolución socialista, porque no hay Revolución socialista sin justicia social.
Para ello habrá que elevar las producciones y exportaciones, erradicar la inflación, hacer que el salario y las pensiones les permitan a los cubanos tener una vida digna como merecen, y que las Formas de Gestión No Estatal y cooperativas no agropecuarias, como actores necesarios de la economía, contribuyan con su actuar a dinamizar la producción nacional.
LA AUTONOMÍA QUE DEFENDEMOS HOY, ES PARA PRODUCIR MÁS, PARA SERVIR MEJOR AL TERRITORIO Y AL PAÍS
Todo lo anterior redundará en una elevación del papel decisivo de la empresa estatal socialista, convocada a demostrar en la realidad eficiencia, disciplina y capacidad de innovar. La autonomía que defendemos hoy, es para producir más, para servir mejor al territorio y al país, para encadenarse de un mejor modo con el sector no estatal sin perder nuestra esencia socialista.


Avancemos por la ruta de las siete décadas del Desembarco del Granma y del Centenario del natalicio de Fidel, conscientes de que el camino es de lucha, de creación, de resistencia inteligente, porque nos asiste la razón, la fuerza moral y un pueblo heroico como el nuestro que constituye la mayor inspiración
Cuidemos la unidad de la nación como “la niña de nuestros ojos, como nos aconsejó Raúl, esa unidad consciente, que se construye día a día con la verdad, la participación consciente y la confianza mutua.
Con Díaz-Canel repetimos que la unidad que necesitamos hoy es la de quienes discuten fuerte, pero marchan juntos”. En el año del Centenario del Comandante en Jefe, honremos su memoria con la inconformidad como paradigma en todo lo que hagamos como acicate para la acción transformadora.
Esta es la Revolución, que ha vencido con hidalguía y honor todos los obstáculos, la Revolución de Fidel, Raúl, y Montané, la Revolución que se hizo con todos y para el bien de todos. Hemos llegado hasta aquí, resistiendo, luchando y creando, y tiene que seguir adelante adecuando sus métodos y estilo a las condiciones actuales.
Con la máxima de Fidel, transitaremos el 2026 con la indiscutible unidad de acción creativa y un especial esfuerzo colectivo como el mayor acicate e inspiración
Es imprescindible fortalecer la UNIDAD
Una UNIDAD basada en el debate, la crítica y la disciplina.
Una UNIDAD basada en el ejemplo personal, el compromiso y la entrega.
Una UNIDAD que se materializa con la participación de todos.
Una UNIDAD bajo el principio de discutir fuerte y marchar juntos.
Solo así superaremos las adversidades, los obstáculos, la compleja situación económica y enfrentaremos el 2026 con optimismo y la confianza certera de un año superior en todos los ámbitos, siendo consecuentes con el legado de nuestro Comandante en Jefe.
En el año del Centenario de su natalicio ¡Qué viva Fidel, que está vivo!
¡Vivan Fidel, Raúl y Díaz-Canel!
¡Viva el 67 aniversario del Triunfo de la Revolución!
¡Hasta la Victoria Siempre!
¡Patria o Muerte!
¡Venceremos!

