El júbilo y la condena que no pueden bloquear

A continuar venciendo al cerco en todas las trincheras llamaron los pineros en la celebración del triunfo de Cuba en la Onu contra el genocidio imperial, seguido por la televisión desde el cine-teatro y colectivos, y convocaron a la solidaridad con damnificados

Aplausos, sonrisas de gozo, exclamaciones de reafirmación revolucionaria y gratitud, consignas enarboladas a viva voz y con los presentes de pie, así como otras expresiones de júbilo y compromiso, se agolparon en el inolvidable mediodía de este ya histórico miércoles 29 de octubre al que se sumaron canciones, poemas y sentidas palabras con que los pineros celebraron en el cine-teatro Caribe, en la capital de la Isla de la Juventud, el contundente triunfo de los 165 países que votaron a favor de Cuba exigiendo el fin del bloqueo en la Asamblea General de la Onu.

Esas manifestaciones de alegría y orgullo tuvieron lugar después de conocerse los resultados de la votación a la resolución cubana, que fue seguida por la televisión en la gran pantalla aquí, al tiempo que, en calles, hogares y demás espacios cotidianos del territorio se compartieron y festejaron similares emociones de regocijo que como olas de tsunami y terremoto de solidaridad antimperialista siguen estremeciendo al archipiélago de los Canarreos.

Desde la enardecida sala del Caribe la joven Milena Figueredo Ferrer, de la dirección municipal de la UJC, hizo un llamado a los pueblos, organizaciones y gobiernos del mundo, en especial a las nuevas generaciones, a no detener la condena al bloqueo injusto e inaceptable que recrudece sobre Cuba el gobierno estadounidense, para continuar ampliando la victoria conquistada en Naciones Unidas por Cuba junto a la abrumadora mayoría de la comunidad internacional.

Rafael Ernesto Licea Mojena, primer secretario del Partido en el territorio, presidió el encuentro con una amplia participación del pueblo y representantes aquí de la sociedad civil institucionalizada, quienes repudiaron el castigo colectivo que encarna esa política genocida del gobierno estadounidense contra toda la nación.

Al expresar su sentir, Marlén Villavicencio Batista, delegada del Instituto Cubano de Amistad con los Pueblos, agradeció a las naciones que apoyaron a Cuba en su lucha contra la guerra económica del imperio y ejercieron el sufragio con el corazón, sin dejarse amedrentar por las mayores presiones y falsedades del gobierno de EE.UU. para lograr sus objetivos de matar por hambre y enfermedades a las familias cubanas.

Yusmary Olivera Pupo, secretaria general del movimiento sindical en el territorio, calificó lo acontecido como un triunfo de la razón, de la justicia y la verdad, que tiene ya una historia de más de seis décadas de resistencia del pueblo y de más de 30 años de la solidaridad internacional en Nueva York, sin escuchar jamás la palabra rendición de nuestra parte, y convocó a proseguir lo alcanzado en la batalla diplomática en las demás trincheras, como la producción de alimentos, las transformaciones que requiere el desarrollo socialista, los encadenamientos y aportes de los nuevos actores económicos, así como la inversión extranjera en función de incrementar la oferta de bienes y servicios.

Junto a otros oradores, Yusmary recabó el apoyo a las familias damnificadas tras el paso del huracán Melissa por el oriente del país, ante los daños materiales en centros laborales y comunidades, con aportes materiales de la población mediante la CTC, los sindicatos y demás organizaciones, desde los espacios habilitados para ello. En mítines similares también repudiaron a los siete gobiernos que votaron en contra del reclamo cubano (EE.UU., Israel, Argentina, Hungría, Macedonia del Norte, Paraguay y Ucrania) por traicionar a sus pueblos y a la justicia, y despreciaron la deplorable actuación de los 12 países que se abstuvieron (Albania, Bosnia y Herzegovina, Costa Rica, Chequia, Ecuador, Estonia, Letonia, Lituania, Marruecos, Moldavia, Rumanía y Polonia).

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Isla de la Juventud
Diego Rodríguez Molina
Diego Rodríguez Molina

Licenciado en Periodismo en la Universidad de La Habana.

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