El diputado Fidel Castro Ruz (III y final)

Pronuncia discurso en la clausura en la Sesión de Constitución en su IV legislatura. Tomado de Sitio Fidel Soldado de las Ideas Estudios Revolución. Fecha 15 de marzo de 1993.jpg Autor: Tomada del sitio Fidel soldado de las ideas Publicado: 13/04/2023

Este 19 de abril se reunirán los diputados electos para dar vida a una nueva Asamblea Nacional del Poder Popular, en la que se discutirán los problemas más acuciantes del país y se buscarán las mejores soluciones. Y cuando el debate se encuentre en su fase más aguda y difícil, nos parecerá escuchar al Comandante en Jefe, convertido para entonces en 470 voces.

El 15 de marzo de 1993 se celebró la sesión de constitución de la Asamblea Nacional del Poder Popular (ANPP) en su 4ta. Legislatura. Fidel, al pronunciar las palabras de clausura, hace un balance crítico de todo lo ocurrido, de los pro y los contra, y define importantes conceptos sobre las funciones del diputado y llama la atención sobre lo que el pueblo espera del trabajo de la nueva Asamblea, de estos se destacan los siguientes:

Nuestro sistema despertó interés, incluso, en los enemigos. Los enemigos que se hacen tantas ilusiones sobre la Revolución, que tanto subestiman a nuestro pueblo, creyeron que era el momento de darle un golpe a la Revolución, puesto que estábamos en período especial.

Afuera se publicaban toda clase de noticias escandalosas: que el 30% anularía o votaría en blanco, que el 40%, que el 60%. Esperaban eso, y el resultado final fue el 7,03% de boletas en blanco o boletas anuladas —y no todas las boletas anuladas fueron con la intención de anularlas—, y un 92,97% de votos válidos; y de ese 92,97% de votos válidos, el 95,06% de voto unido.

Y no me hablen como excusa del voto unido, porque el voto unido fue simplemente la estrategia del pueblo, la estrategia de la Revolución; sin el pueblo simplemente no se habría podido obtener jamás el 88,40 por ciento del total de boletas depositadas en las urnas para el voto unido.

¿Cuál habría sido el resultado si la Revolución no tuviera la mayoría del pueblo?, pues, sencillamente, aquellos que están contra la patria, contra la Revolución y contra el socialismo, habrían anulado de una forma u otra, tachándolas o depositándolas en blanco, la mayoría de las boletas. Es que si la Revolución no tuviera la mayoría del pueblo sería bien sencillo deshacerse de la Revolución.

Se insistió mucho en un principio, lo cual nos produce una gran satisfacción con relación al voto unido. Se dijo una vez y muchas veces que no era una consigna, sino una estrategia; que se planteaba como una necesidad de la Revolución, y que lo que se quería era que solo de forma consciente, si se comprendía bien esa necesidad y las razones de esa estrategia, se aplicara el principio del voto unido.

A la población le quedó una idea: que los contactos se mantengan, e hizo más claro el hecho de que con este sistema el diputado tiene una doble representación: representa al distrito y al municipio, y representa a la nación.

Un diputado debe hacer todo lo que pueda por su país; pero el diputado debe hacer todo lo que pueda por su distrito, y cuando no pueda hacer nada, hablar con los electores cada vez que pueda y explicarles qué se hace y qué no se hace. Constantemente hay que estar dando explicaciones.

Esta campaña no se caracterizó por promesas, ni se debe caracterizar ningún diputado por promesas ilusorias, promesas infundadas, promesas sobre algo que no se pueda cumplir; el diputado tiene que decirle la verdad al ciudadano.

Siempre hay algo que dependa de un esfuerzo, no de recursos materiales, y eso hay que explicarlo. La gente comprende.

Todo este proceso debe marcar un estilo nuevo en el trabajo de los cuadros políticos y en el contacto con las masas.

Les decía que en este momento tan difícil es necesario tener una Asamblea de primera línea. La historia nos juzgará no por lo que hayamos hecho antes, sino por lo que hagamos ahora en estas circunstancias.

Hay que acostumbrarse a trabajar y hacer las cosas en las más difíciles condiciones, que cuando falte el jefe, el segundo se ocupe, que cuando falte el segundo el tercero se ocupe, y quien vea a la gente trabajando en situación de emergencia como esta, se da cuenta de que hay mucha gente en la base con magníficas cualidades.

Se espera de la Asamblea no solo un contacto mayor de los diputados con el pueblo, sino un trabajo mucho más activo en todos los sentid

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