¿Cómo iniciaron los pineros el año 1959?

Las mismas calles que estos primeros días de enero disfrutaron de la música popular, bailaron y celebraron un nuevo aniversario del triunfo de la Revolución, hace 66 años también estuvieron muy agitadas, solo que de modo muy distinto, pues luchaban por la conquista del poder que hoy defendemos y seguimos afianzando.

Alrededor de Presidio Modelo se desenvolvieron los acontecimientos en las primeras horas del año 1959/ Foto: Archivo

En movilización popular sin precedente los revolucionarios pineros asumieron aquel primer día de 1959 el control político y militar y convirtieron a la segunda ínsula del archipiélago cubano el primer territorio libre, fuera de la ciudad de Santiago de Cuba y de algunas localidades ocupadas por el Ejército Rebelde en la zona oriental.

Desde dentro y fuera de Presidio Modelo se forzó la liberación de los revolucionarios encarcelados, porque a la entrada del penal se habían concentrados muchos del pueblo pinero. Pero no fue cuestión de una jornada, sino resultado de la gran unidad lograda por las milicias del Movimiento Revolucionario 26 de Julio en la cárcel y las organizadas por diversos sectores del pueblo bajo el mando central de la Revolución.

Aquí también desde los primeros momentos se enfrentaron maniobras encaminadas a sabotear la Revolución, entre ellas la fraguada por la Agencia Central de Inteligencia (CIA) del gobierno de Estados Unidos alrededor de Ramón Barquín, coronel del régimen batistiano, encarcelado en presidio, una vez fracasado todo lo previsto por la figura de Cantillo, y también acciones diversionistas, como la fuga de presos comunes aquel mismo día primero, y cuya situación fue normalizada en  horas, que puso a prueba la capacidad para defender el joven poder.

La liberación de los presos políticos en una isla convertida en centro penitenciario, constituía una de las primeras medidas, estocada a fondo contra el régimen dictatorial aquí y premisa para el triunfo, ya que la ausencia del Ejército Rebelde aquí obligó a esos presos políticos ser las fuerzas encargadas de asegurar el triunfo y posteriores cambios, junto al pueblo.

Armando Hart Dávalos, de la dirección del Movimiento 26 de Julio, en sutestimonio Mis últimos días de la cárcel y los primeros del triunfo, narra: “Dentro de la cárcel poseíamos clandestinamente un radio en la galera, que custodiaba el compañero Casto Amador. Transcurrían las semanas finales de diciembre de 1958. Pasamos la noche del 24 escuchando las noticias acerca de los avances de las tropas rebeldes, y conocimos de las fuerzas que al mando de Almeida se acercaban a Santiago, de la marcha de Camilo y el Che hacia el centro de la Isla, y de la toma de distintos pueblos en esa región.

Desde dentro y fuera de Presidio se forzó la liberación de los revolucionarios encarcelados/ Foto: Archivo

“A propósito de la invasión a Occidente, Barquín dijo: ‘No es posible que esto sea así, porque militarmente ello no es factible’, y un compañero le respondió: ‘Coronel, lo hicieron porque no sabían que era imposible’. El ambiente general de la galera era de ascenso revolucionario.

“Se ha comentado que Ramón Barquín estaba promoviendo un golpe de Estado desde la cárcel, a partir de sus contactos con el Ejército, sus relaciones con la Embajada norteamericana, y que su objetivo era neutralizar la victoria de la Revolución…

“… En las primeras horas de la madrugada del histórico Primero de Enero –prosigue Hart en su relato– recibimos el ¡Notición! por el radio que tenía Casto Amador. Todos nos empezamos a preparar para salir, pero los guardias no lo permitían. Allí nos mantuvieron hasta las dos o las tres de la tarde, cuando se apareció un grupo de oficiales para buscar a Barquín y a los presos militares. Querían utilizar esta última carta contra el movimiento popular.

“Los oficiales llegados de La Habana pretendían que los civiles nos quedáramos presos en la circular. Barquín asumió similar posición.

Armando Hart encabezó el Movimiento 26 de Julio en presidio/ Foto: Archivo

“Borbonet, Fernández, otros militares y la Dirección del Movimiento 26 de Julio, les planteamos que tal cosa era inaceptable. Fui a discutir con Barquín y le exigí la liberación de todos los presos políticos.

“… Las pretensiones de dejarnos recluidos a los compañeros del Movimiento fueron frustradas por la unidad con que actuaron Borbonet, Fernández, los militares que ellos capitaneaban y la masa de militantes del 26 de Julio que nosotros representábamos.

Aquel mismo primero de enero, a sólo 16 días de su nacimiento como emisora privada del latifundista batistiano Francisco Cajigas, la CMBY que radicaba en la esquina de Calle Martí y 18 en Nueva Gerona, pasó a manos de la Revolución y trasmitió una alocución al pueblo en la voz del entonces capitán José Ramón Fernández, horas después de obligar a las autoridades del derrocado régimen de Batista a libertarlo junto a los demás revolucionarios.

El entonces capitán José Ramón Fernández trasmitió una alocución al pueblo por la emisora local CMBY/ Foto: Archivo

En su relato de esas históricas jornadas prosigue evocando Armando Hart:“… Se designó a Jesús Montané para la dirección civil del municipio de Isla de Pinos, y el día 2, como a las diez de la mañana, con un discurso en el portal del Ayuntamiento tomó posesión como alcalde.

“A media noche, nos llamaron los compañeros que habíamos enviado junto a Barquín y nos informaron que el ejército de Batista estaba derrotado; nos aconsejaban que esa misma madrugada saliéramos hacia la capital. Así lo hicimos en las primeras horas del 2 de enero. Viajamos en un avión, cargado de hombres y armas hacia el aeropuerto de Columbia, hoy Ciudad Libertad”.

Era otro de los tempranos aportes de los pineros desde su territorio, el cual fue además capaz de preservar la victoria y cumplir en lo esencial de forma muy rápida el Programa del Moncada expuesto por Fidel en el juicio tras el asalto a esa fortaleza santiaguera el 26 de julio de 1953.

En Isla de Pinos, se liquidó además el aparato coercitivo del Estado burgués-latifundista. Alrededor del 20 de enero fueron intervenidas la Compañía de Vapores y la Eléctrica Nueva Era, los latifundios de los batistianos Cajigas, Justo Luis del Pozo, Goyo Hernández y Ramón Rodríguez, dueño, además, de la fábrica de cigarros y tabacos Partagás.

A Jesús Montané lo designan alcalde de Isla de Pinos tras el triunfo/ Foto: Archivo

Importante papel en la consolidación de la unidad y la participación del Ejército Rebelde en puestos claves aquí, tuvo la visita del comandante Camilo Cienfuegos el 17 de febrero de 1959.

Aquí los revolucionarios asumieron el poder político total y crearon las condiciones para el rápido avance de las transformaciones, muchas de las cuales pusieron a prueba las mejores ideas de Fidel como las revoluciones hidráulicas, industrial y educacional en lo que fuera después Isla de la Juventud y de la solidaridad, imposible de imaginar aquellos primeros días del 59.

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Historia Isla de la Juventud
Diego Rodríguez Molina
Diego Rodríguez Molina

Licenciado en Periodismo en la Universidad de La Habana.

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