
Al menos seis personas murieron y 22 resultaron heridas este sábado tras la irrupción de terroristas armados en el tribunal provincial de Sistán y Baluchistán, ubicado en la calle Azadi, provincia de Zahedán, al sudeste de Irán.
El ataque fue reivindicado por el autodenominado grupo terrorista Jaish al-Adl. Las fuerzas de seguridad iraníes respondieron rápidamente, abatiendo a tres asaltantes en los enfrentamientos.
Tres miembros del equipo de seguridad del juzgado fallecieron mientras defendían el edificio. El personal de seguridad y las fuerzas del orden permanecen desplegados alrededor y dentro del juzgado.
El general de brigada Alireza Daliri, comandante adjunto de la Policía en Sistán y Baluchistán, declaró en una conferencia de prensa que la «célula terrorista afiliada al régimen sionista intentó infiltrarse en el edificio judicial de Sistán y Baluchistán en la ciudad de Zahedan, disfrazándose de ciudadanos comunes que buscaban servicios legales». Gracias a la vigilancia y la rápida actuación de las fuerzas de seguridad, el intento fue frustrado.
Lamentablemente, durante el ataque, uno de los terroristas logró lanzar una granada dentro del edificio antes de ser abatido, causando las muertes de civiles, incluido un bebé, cuya madre sobrevivió pero sufrió heridas graves. Daliri confirmó que la célula terrorista fue completamente desmantelada.
La provincia de Sistán y Baluchistán, que limita con Pakistán, es escenario de varios ataques terroristas contra civiles y fuerzas de seguridad en los últimos años.
Las autoridades iraníes han acusado en el pasado a potencias extranjeras, incluyendo a Estados Unidos e Israel, de apoyar indirectamente a estos grupos para desestabilizar la región.
En abril pasado, las Fuerzas Terrestres del Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica de Irán (CGRI) asestaron un golpe a Jaish al-Adl, matando a uno de sus cabecillas en una operación antiterrorista.
En octubre del año anterior, diez miembros de las fuerzas policiales iraníes murieron en otro ataque terrorista en la misma provincia, el cual también fue atribuido a este grupo.
Jaish al-Adl perpetró numerosos atentados terroristas en Irán, principalmente en Sistán y Baluchistán, utilizando tácticas como el secuestro de guardias fronterizos y ataques contra civiles y comisarías de policía con el objetivo de sembrar el caos y el desorden.
Las autoridades provinciales han pedido a la población que se mantenga alejada del área judicial.
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