Dijo un pensador asiático que la raíz de todo bien crece en la tierra de la gratitud y el corazón de Mercedes Jarquín Laynes como el de tantos exbecarios que cursaron estudios en escuelas de la Isla de la Juventud es terreno fértil porque es agradecido.
En la actualidad son mujeres y hombres de bien, no podía ser de otra manera, pues en ello encontraron la forma de retribuir tanto amor en sus años de formación en esta Isla que anida en los profesionales y excelentes seres humanos que son.
Sus dos hermosos hijos, como ella los llama desde el cariño, saben que su madre tiene en Cuba a su segunda Patria; que aquí estudió, se hizo una persona integral y ha mantenido por años una amistad imperecedera con aquellos con quienes aquí compartió la vida.
Mercedes vuelve por tercera ocasión, esta vez con motivo del aniversario 45 de la educación internacionalista tras un ansiado rencuentro con los cubanos, que son también su familia.
“Soy exbecaria de esta Esbec tan hermosa, la Carlos Fonseca Amador. Vine el 30 de octubre de 1980, fue la segunda generación porque una había venido en el ’79, después de la guerra.
Estudié aquí 8vo. y 9no. grado. Posteriormente pasé a cursar estudios en el tecnológico textil Ángel Ameijeiras, en La Habana.
“Ya había venido dos veces, en el 2015 y en el 2017. Tenía pensado venir en el ’19, pero la pandemia nos afectó a todos y no fue posible. Hoy regresé con mucha alegría porque hacía 37 años no veía a mis compañeros del Politécnico, me pude reencontrar con ellos y me abrieron las puertas de sus casas. Fue bien bello.
“El nuevo encuentro con aquellos que formaron parte de nuestras vidas ha sido maravilloso, cada uno tiene un lugar especial en nuestros corazones. He visto a algunos cocineros, personal de limpieza, profesores… a mi profesor Erasmo a quien quiero mucho, a Marlen, Toranzo… He podido verlos y eso me hace muy feliz porque fueron y son muy importantes para nosotros.
“Este rencuentro con la escuela me trae a la mente recuerdos hermosos y solo buenos, cuando iba a clases, al campo, el autoestudio, participábamos en el matutino, mostrábamos nuestra cultura… Esta por siempre será mi escuela querida y ya le digo, el volver solo me trae buenos recuerdos, por eso mi eterno agradecimiento a Fidel.
“En la actualidad trabajo en el Seguro Social, soy inspectora de higiene y seguridad del trabajo, tengo ya 15 años en esa institución. Formé una familia, tengo a mis hijos, un nieto y mi madre que aún vive. Los exbecarios siempre tenemos la añoranza de Cuba, de lo que vivimos junto a su gente.
“Lo que soy, lo que tengo hoy se lo agradezco al Comandante Fidel Castro y al pueblo cubano que en medio de sus limitaciones nos han dado su apoyo y amor. Ustedes se convirtieron en los familiares que no teníamos aquí, fueron nuestros amigos, por eso siempre tendrán mi eterno agradecimiento”.
