En el consejo popular Juan Delio Chacón Aldana todos quisieron ser partícipes del proceso sin precedentes que viven la nación cubana. En varios de los colegios electorales fue notable la asistencia de adultos mayores quienes concurrieron a ellos para ofrecer su derecho al voto por el nuevo Código de las Familias.

Teniendo en cuenta que el nuevo Código de las Familias se protegen los intereses de los adultos mayores (personas de uno y otro sexo que tienen 60 años de edad o más) y las personas en situación de vulnerabilidad (aquellas que tienen un entorno personal, familiar o relacional y socioeconómico debilitado, y como consecuencia de ello, presentan una situación de riesgo que puede llevarlas a una exclusión social), los ancianos también decidieron asistir a las urnas.

Ese fue el caso de Marina González Vega quien en su silla de ruedas se personó en su colegio y también María Mayo Machado de 81 años.

Paulina Abreu Revé a sus 72 años posee una discapacidad visual, pero no fue obstáculo para participar, durante la visita de una de las representantes del colegio agradeció que la hayan tenido en cuenta llevándole hasta su casa la boleta.
A todas les parece bien que en la nueva normativa se reconozca el papel de las abuelas y abuelos en la transmisión intergeneracional de las tradiciones, cultura, educación, valores y afectos.