Los trabajadores de la Empresa Eléctrica en la Isla de la Juventud fueron reconocidos por la titánica labor ante la contingencia electroenergética
No queda duda, ante los eléctricos hay que quitarse el sombrero. Estos hombres y mujeres lo volvieron a corroborar ante la reciente contingencia energética cuando las horas se les dislocaron a los días porque lo trascendente era el recobro de ese ruido ensordecedor que mermó debido al silencio de varios de esos añosos motores.
Para entonces las jornadas se tornaron intensas, no había espacio para el cansancio, la ingeniosidad de los mecánicos y operarios creció, la ayuda solidaria de otras provincias llegó como también las piezas y los recursos desde la nación; además del apoyo de los trabajadores de servicio de la Empresa Eléctrica y del sector no estatal para que en medio del batallar no les faltaran la merienda o el sorbo de café.
Para entonces había descendido la disponibilidad de generación debido a un déficit de seis MW y los hogares pineros en las noches y madrugadas quedaron a oscuras por cuatro horas durante varios días, hasta que estos hombres y mujeres de luz, poco a poco recobraron la vitalidad del sistema electroenergético territorial hasta llegar a los 25 MW, según explicó Norge García Mayo, al frente de la UEB de Generación.
De nuevo volvieron hacer historia los eléctricos, quienes reciben por disímiles vías la gratitud de los pineros y este viernes la de las máximas autoridades del municipio, cuando Jeordanis Suárez Rodríguez, director de la entidad, mereció el reconocimiento de manos de Osbel Lorenzo Rodríguez, primer secretario del Partido aquí, y Rafael Ernesto Licea Mojena, presidente de la Asamblea Municipal del Poder Popular.
Las demás organizaciones políticas y de masa se sumaron al agasajo; mientras representantes de la brigada nacional EMGEF y la de Sancti Spíritus, así como MCV Motores y Turbina también fueron distinguidos por el apoyo y encomiable labor.
“El quehacer realizado nadie lo puede demeritar, menos cuando hubo tanto trabajo, fuerza e intrepidez”, dijo el dirigente partidista. En los rostros de los eléctricos se agigantan las expresiones de orgullo, agradecimiento y compromiso, sí, porque queda camino por andar en la sostenibilidad del sistema electroenergético local, pero ante esta contingencia merecen que nos quitemos el sombrero.
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