Este lunes 28 de octubre, a 65 años de la desaparición física de Camilo Cienfuegos Gorriarán, el pueblo pinero lo recordará en el acto central que tendrá lugar en el parque que lleva su nombre en calle 18 y 39, frente a La Cocinita, en Nueva Gerona, donde se concentrarán los pineros a las siete de la mañana organizados en bloques, antes de partir a lo largo de calle 18 para la tradicional ofrenda Una flor para Camilo en el malecón de la capital local.
A las 7 y 30 está prevista la marcha hasta el río las Casas, donde los participantes depositarán flores en homenaje al Héroe de Yaguajay, a quien se le ha dedicado diversos momentos en escuelas, colectivos y barrio durante la jornada que lo evoca junto a Ernesto Guevara de la Serna.
Con solo 27 años se interrumpió físicamente su vida, a los 301 días de la Revolución triunfante y aunque fue el último expedicionario en enrolarse en el Granma, es y será siempre el Señor de la Vanguardia para los cubanos, con su presencia de guerrillero invicto como dijera el Che.

Después de confirmarse la noticia de la desaparición de Camilo, el 28 de octubre de 1959, Che expresó: “Camilo fue el compañero de cien batallas, el hombre de confianza de Fidel en los momentos difíciles de la guerra y el luchador abnegado que hizo siempre del sacrificio un instrumento para templar su carácter y forjar el de la tropa…”, como sus compatriotas hoy en la actual situación excepcional de contingencia energética y resistencia.
El pueblo de Camilo es el lema central de la convocatoria, devenida una de las etiquetas a multiplicar en las redes sociales en Internet, sobre todo en X, donde también comparten otras consignas como Llevamos en el corazón el espíritu revolucionario de Camilo Cienfuegos y Somos el pueblo de Camilo, herederos de su valentía y compromiso.
Fue audaz combatiente, teniente y jefe de la vanguardia de la columna del Comandante cubano-argentino, con especial olfato para descubrir el peligro y guiar a la tropa, el primero en lanzarse contra el enemigo y combatirlo, y al ser herido en una ocasión ordena atender primero a sus compatriotas.
Así era Camilo de humano, amable y risueño, excelente organizador de guerrilleros y trabajadores; quien llevó la invasión a Occidente con éxito y al triunfo revolucionario fue designado por el Comandante en Jefe para entrar en la capital cubana y dirigir el Estado Mayor del Ejército.
De él sentenció Raúl Castro: “Cuando Fidel lo envía a la difícil misión de neutralizar la intentona contrarrevolucionaria en Camagüey, durante octubre de 1959, no solo apreciaba… la más alta representación de la lealtad, la valentía y la audacia, sino también para enfrentar un problema de abiertos matices ideológicos, al dirigente político de inquebrantable formación proletaria”.
(*) Colaborador