os grandes medios de prensa de Estados Unidos, al tanto de la «gran noticia» describieron al actual gobernante como alguien que, en ocasiones, al hablar se quedó paralizado por unos momentos, mirando al vacío. Además, personas que siguieron el debate en línea se percataron de que apenas parpadeaba
Parece incierto. ¿Cómo creer que quienes se ofendían y se sacaban trapos sucios, ante televidentes de todo el mundo, eran el actual Presidente y el exmandatario de Estados Unidos, la mayor potencia del planeta?
«Tú eres el imbécil, tú eres el perdedor», fue uno de los insultos de un Joe Biden que se sentía como acorralado, por momentos.
Los grandes medios de prensa de Estados Unidos, al tanto de la «gran noticia», describieron al actual gobernante como alguien que, en ocasiones, al hablar se quedó paralizado, mirando al vacío. Además, personas que siguieron el debate en línea se percataron de que apenas parpadeaba.
Concluida la discusión, una encuesta de cnn dio por ganador a Trump, con un 67 % de aprobación.
«Es un buen hombre. Ama a su país. Está haciendo lo mejor que puede. Pero esta noche tiene que superar una prueba para restablecer la confianza del país y de la base, y no lo ha conseguido», afirmó Van Jones, exasesor de Obama, y añadió que, para muchos partidarios de Biden, su fracaso «es doloroso».
La exdirectora de Comunicación del actual mandatario, Kate Bedingfield, citada por rt, calificó la actuación de Biden de «realmente decepcionante».
Los partidarios del demócrata ya están discutiendo la posibilidad de cambiar la candidatura presidencial, en medio de crecientes dudas sobre la capacidad del actual presidente para llevar a cabo una campaña electoral competitiva, a cuatro meses de las elecciones, refleja el citado despacho de prensa.
Un legislador demócrata que ha sido un sólido partidario de Biden declaró, tras el debate, que es «hora de hablar de una convención abierta y de un nuevo candidato demócrata».
En tal caso, podrían ser nominados la vicepresidenta Kamala Harris, con índices bajos de aceptación; el gobernador de California, Gavin Newsom; la de Míchigan, Gretchen Whitmer y el de Illinois, J. B. Pritzker.
Las garantías de este show electoral –que todos los días insisten en imponer como paradigma único de democracia– son mayores en tanto más cáusticos sean los ataques al oponente; mientras más en ridículo lo pongan. Trump, por ejemplo, dirigió sus cañones a la edad de Biden, y a lo que llamó «limitaciones cognitivas».
«Hice dos pruebas cognitivas. Las pasé con honores, ustedes lo saben, lo publicamos. Él no aprobó. Que apruebe al menos una. No puede responder a las cinco primeras preguntas», dijo Trump cuando le preguntaron por su estado físico.
De improperios, de eso va el debate electoral, que más se parece a una comedia.
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