Un Plan de Estado por la vida (+ Fotos)

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A propósito del Día Mundial de la Diversidad Biológica, este 22 de mayo, los cubanos pueden hablar de una estrategia que no tiene precedentes y es continuidad del pensamiento de Fidel, siempre al tanto de los efectos del cambio climático y cómo contrarrestarlo

Este Día Mundial de la Diversidad Biológica con que la Asamblea General de la Organización de Naciones Unidas (ONU) designó cada 22 de mayo, nos motiva a reflexionar en qué más podemos hacer desde la comunidad y el colectivo de trabajo o estudio para fomentar y sensibilizar acerca de la importancia de preservar las especies y toda su riqueza.

El llamado es más urgente a partir del Plan de Estado para el enfrentamiento al cambio climático, conocido también como Tarea Vida, que aprobara en días recientes el Consejo de Ministros de Cuba con un alcance y jerarquía sin precedentes en la nación como tampoco en el mundo.

Ciertamente, cada vida animal tiene su rol y en la misma medida que nos preocupemos por preservar esa necesaria variedad natural, estaremos cuidando la armonía medioambiental, la vida y el futuro, cada vez más amenazado.

EL MAYOR PELIGRO AL PATRIMONIO NATURAL

Hoy el clima para Cuba es cada vez más cálido y extremo; se ha observado gran variabilidad en la actividad ciclónica, el régimen de lluvias ha cambiado e incrementa de manera significativa la frecuencia y extensión de las sequías, mientras las inundaciones costeras por la sobreelevación del mar y el oleaje, producidos por huracanes, frentes fríos y otros eventos meteorológicos extremos, “representan el mayor peligro debido a las afectaciones que ocasionan sobre el patrimonio natural y el construido”.

Así lo expresa por lo claro la edición del periódico Granma del 27 de abril último acerca del importante acuerdo, y enfatiza que “resultan decisivas las acciones encaminadas a que la población aumente la percepción del riesgo, sus conocimientos sobre el tema y la participación en el enfrentamiento al fenómeno”.

¿Cómo pueden comunidades y empresas integrar y enriquecer la biodiversidad y cuidado medioambiental en sus labores cotidianas?

Cualquier actividad en distintos lugares y sectores consume recursos naturales y genera impactos que afectan a la diversidad biológica, por lo que todo esfuerzo por atenuar estos últimos y favorecer el óptimo empleo del agua y otros elementos, deviene obligación de familias y colectivos, así como de cada persona.

La biodiversidad es base para la vida y son esenciales los servicios de los ecosistemas, desde el sustento de las personas como la alimentación, hasta sus medios de vida y el desarrollo en todas las áreas, como la madera, incluyendo ramas como la agricultura, la silvicultura, la pesca y el turismo, para solo poner algunos ejemplos de una amplia gama.

La movilización realizada por los pineros este fin de semana para la limpieza de barriadas y las demás acciones de saneamiento son tareas a favor de la biodiversidad y con las cuales mucho se contribuye a la salud y bienestar de todos.

A propósito del Día Mundial de la Diversidad Biológica y con la visión realista y previsora del Plan de Estado para el enfrentamiento al cambio climático puede meditarse más e incluso en otras aristas acerca de cómo pueden contribuir en mayor medida los pobladores.

CONTRARRESTAR VULNERABILIDADES

Aunque el período crítico de incendios forestales expira en mayo con el inicio de la estación lluviosa el impredecible comportamiento del clima convoca a mayor vigilancia para evitar quemas y en caso necesario solicitar el permiso correspondiente a las autoridades locales, así como impedir descuidos de cazadores furtivos o fumadores irresponsables en áreas boscosas.

Es obvio que en esas zonas deben extremarse las medidas respecto a las acciones de seguridad al castrar colmenasy no circular en vehículos sin matachispas en bosques, donde los siniestros deterioran la flora y la fauna, y en cuya protección mucho pueden hacer quienes allí residen.

Es vital la prevención contra los incendios forestales, responsables de la pérdida de la biodiversidad, la degradación del suelo y otros daños que se agravan con los cambios climáticos.

Pero el esfuerzo por la biodiversidad debe ir más allá y enfrentar con más energía también las indisciplinas urbanas, porque cuando algunos vecinos echan basura en lugares inadecuados perjudican la salud de quienes allí viven, además de acabar con suelos ricos en minerales, contaminar el entorno y ocasionar otros perjuicios acumulados e incalculables agravados por el cambio climático.

De ahí que entre las acciones para contrarrestar las afectaciones en zonas vulnerables, esté no permitir construcciones de nuevas viviendas en asentamientos costeros, además de reducir las áreas de cultivo próximas al litoral o dañadas por la intrusión marina a los acuíferos subterráneos.

La Tarea Vida, expresión de la voluntad política de los cubanos en favor del pueblo, su presente y futuro, igualmente contempla asegurar la disponibilidad y uso eficiente del agua –que no puede limitarse solo a la rehabilitación del acueducto– como parte del enfrentamiento a la sequía, dirigir la reforestación hacia la máxima protección de los suelos y las aguas, así como detener el deterioro de los arrecifes de coral, que por su protección dan fama internacional al territorio pinero, rehabilitarlos y conservarlos.

La estrategia es continuidad del pensamiento de Fidel, siempre al tanto de los efectos de ese fenómeno que amenaza a la diversidad biológica, con la especie humana en su centro, e insistió en las maneras de contrarrestarlo.

 

 

Un incendio forestal afectó durante cuatro días áreas rurales del municipio especial Isla de la Juventud

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Isla de la Juventud
Diego Rodríguez Molina
Diego Rodríguez Molina

Licenciado en Periodismo en la Universidad de La Habana. Tiene más de 40 años en la profesión

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