Producciones por una adecuada vivienda

El Programa Local de Materiales de la Construcción se extiende para asegurar un derecho consagrado en la nueva Carta Magna que ratificaremos este 24 de febrero

Dotar a cada cubano de una vivienda adecuada, más que una política amparada en el articulado de la recién aprobada Constitución y prevista a la ratificación popular, constituye un ejercicio propio de la vocación humanista de nuestro proyecto social.

En este sentido, en las sesiones de trabajo de la Asamblea Nacional celebrada el pasado diciembre, se presentó el programa  para la rehabilitación del fondo habitacional del país, donde se pondera, entre otras acciones, la necesaria eficiencia del Programa de Producción Local y Ventas de Materiales de la Construcción surgido en el 2011.

La Isla de la Juventud, territorio muy afectado por los fenómenos climatológicos, también implementa el programa con discretos resultados. La Unidad Empresarial de Base (UEB) Materiales de la Construcción, perteneciente a la Empresa de Construcción y Mantenimiento a Inmuebles, tiene como encargo estatal la producción de recursos para las edificaciones.

Sus actuales aportes se concentran en bloques de 10 y 15 centímetros (cm) de ancho, tanques de hormigón para almacenar 1200 y 500 litros de agua, viguetas y plaquetas para conformar cubiertas ligeras, marcos de hormigón, piso de lozas y de granito (baldosa pulida), lavaderos y mesetas. Estas no suplen la alta demanda, mas, tributa al programa constructivo.

Un 80 por ciento de estos productos se destina al Comercio Interior para su venta a la población, con prioridad para los subsidiados, y el resto a obras de desarrollo local acometidas por el Gobierno. Así lo dio a conocer Leyanis Chacón Montoya, directora de la UEB.

ESCOLLOS E IMPERATIVOS

“Diariamente producimos aquí alrededor de 150 lozas de piso, 2 tanques de agua, 500 bloques y alrededor de 50 plaquetas”, afirmó la directiva, explicando además que cuentan para producir cada uno con maquinarias manuales, impidiendo esto mayores resultados.

Señaló que otro problema que enfrentan es el abastecimiento de materias primas, principalmente los áridos, fabricados en el municipio. La entrada tardía al proceso de elementos como polvo de mármol, granito, arena, constituye escollo para el cumplimiento de los planes.

Incide en la problemática la disponibilidad de transporte para trasladar los materiales desde donde se elaboran, por no disponer de un medio propio y tener que recurrir a contrataciones, muchas veces limitadas por el combustible y otras causas.

Sin embargo, el suministro de los materiales de factura nacional, pese a las dificultades con la transportación de carga el pasado año, se comportó estable. La disponibilidad de cemento blanco y gris permite considerables producciones de lozas de piso, por ejemplo, al ser estos junto a la arena sílice y la pintura terracota sus materias primas.

Estas razones convencen de la necesidad de una pronta inversión en las maquinarias, rudimentarias en su mayoría, y en vehículos de transportación de carga para alcanzar imprescindibles éxitos en un programa destinado a los más desprovistos.

De igual forma, del 80 por ciento de los materiales de la construcción ofertados por el Comercio la mayor cantidad va a manos de los subsidiados, priorizados dentro del Programa de la Vivienda, por lo tanto si son menos los rendimientos también se afectará a los que construyen por esfuerzo propio.

Por el momento se pretende instalar otra máquina para la fabricación de bloques de 15 cm y arreglar otra para bloques de 10 cm, completando un total de tres, lo que aumentaría significativamente a mil 500 bloques diarios la producción.

APORTES POR CUENTA PROPIA

No solo esta UEB es la encargada de la producción local de materiales de la construcción, tiene el auxilio de 11 propietarios de las llamadas “bloqueras”. Estos trabajadores por cuenta propia, distribuidos en los poblados de Nueva Gerona, La Fe y La Demajagua, contribuyen al empeño de una vivienda adecuada.

Entre los innovadores se encuentra César Pérez Cuevas, quien desde su patio situado en calle 22 entre 51 y 53 fabrica bloques de 50 cm de largo, tanques de ambos tipos y lavaderos.

Inmerso junto a otros compañeros en la introducción de tanques con capacidad para 500 litros, César, admite que es una novedad y actualmente verifican dónde son más útiles.

En cuanto a los lavaderos explicó que posee 2 moldes y depende de las condiciones climáticas porque la humedad limita la velocidad de secado. A pesar de la disyuntiva termina alrededor de 30 mensualmente. Como principal obstáculo para alcanzar mejores resultados también refiere la inestabilidad del transporte y del abastecimiento de áridos.

Casi al final del periplo por su patio, mostró con orgullo un éxito que ya cosecha. Las tapas para tanques que confecciona tienen forma de tapón. “Así también contribuimos a la lucha antivectorial, no pueden entrar mosquitos y el viento no las eleva”, dijo, agregando el ahorro que representa su elaboración y que son livianas.

En cuanto al Programa de Producción Local y Venta de Materiales de la Construcción el territorio, junto a otros casi 50 municipios del país, fue señalado negativamente en su XIII evaluación, porque todavía no se generan las cantidades necesarias de materiales. Existen reservas, desde los puntos de vista objetivo y subjetivo, centradas en la ineficacia a la hora de gestionar la producción en la base, las afectaciones climatológicas y en la asimilación del programa por algunos directivos.

Multiplicar las capacidades constructivas requiere, además de no pocas inversiones, mucha consagración al trabajo, pero hay que pensar en aquellos que aún viven en facilidades temporales sin las óptimas condiciones. Ellos que no piden otra cosa que la posibilidad de disponer de una vivienda adecuada, un derecho constitucional por el que votaran sí este 24 de febrero.

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