Quisicuaba, mucho más que un museo: Los rostros de la solidaridad

En saludo al Día internacional de los museos se muestra el trabajo que hoy, en condiciones de aislamiento social, realiza el Museo Quisicuaba a través de su programa socio-cultural. Museo de categoría Especial, es único de su tipo en Cuba por su inserción en la comunidad. Un especial para Cubadebate.

Foto: Julio Larramendi

Son las 11:30 a.m. y en la explanada de la esquina de Maloja y Ángeles, en Los Sitios, se va formando una organizada fila de personas con sus nasobucos y portando vasijas plásticas. Un hombre alto y robusto les indica guardar las distancias y muestra a algunos cómo fijar la mascarilla al rostro. Todos responden con atención y respeto.

Es el Doctor en Ciencias Enrique Alemán Gutiérrez, quien dirige el grupo gestor del proyecto Quisicuaba, nacido por iniciativa de la Asociación Espiritista Kardeciana Cruzada, una entidad religiosa fundada el 12 de octubre de 1939, por Andrea B. Zabala Ortega, su abuela y avalado oficialmente el 12 de octubre de 2008 como un espacio para el diálogo interreligioso “donde reina la paz, la espiritualidad y la sabiduría de nuestros ancestros en pos del mejoramiento humano”.

En pocos minutos comenzarán a repartirse, como todos los días, de lunes a viernes, cientos de raciones de almuerzo, preparadas por la institución. Son beneficiados los moradores, con determinantes sociales específicas, del municipio Centro Habana, donde están enclavadas las dos casas que ocupa el Cabildo, una dedicada al museo y otra, el Seminario, con espacios para las clases y la preparación de los alimentos. Simultáneamente, bicitaxis autorizados pasan a recoger los almuerzos de los barrios más lejanos y bolsas con utensilios para los trabajadores sociales.

La Categoría Especial le fue concedida al museo, único de su tipo en el país, entre otras razones, por el destacado trabajo que realiza en la comunidad, y al que se le incorporan a los fondos etnológicos que conserva, los histórico-artísticos sobre los orígenes de la zona y los asociados al Partido Ortodoxo, lo que permite a estudiantes e investigadores profundizar en estos temas y fortalecer aún más los lazos que ya sostiene con los vecinos de la localidad. Allí también se muestran hermosos altares y espacios para servicios religiosos espiritistas y de los ritos cubanos de matriz africana de Ocha e Ifá.

Hoy, dadas la necesidad de aislamiento social, sus salas permanecen silenciosas, al igual que el espacio del Seminario, en la casa aledaña, donde usualmente se desarrollan una treintena de programas de educación y cultura comunitarias, con la misión de contribuir a la reinserción de ex reclusos, modificar actitudes proclives a la delincuencia y la prostitución, orientar a alcohólicos, pacientes con VIH, madres solteras y, bajo la tutela de la Universidad de La Habana, de realizar investigaciones para tesis de maestrías y doctorados.

Coincidiendo con una de nuestras visitas, un equipo del Instituto Finaly de Vacunas desarrollaba una campaña de vacunación en Los Sitios, recibiendo todo la colaboración del Cabildo Quisicuaba y sus decenas de colaboradores voluntarios.

En el centro de todo el esfuerzo, está la comunidad. Los pobladores saben que, además del trabajo del estado, tienen el apoyo solidario, material, pero sobre todo, moral, de los hombres y mujeres que cada día están allí para y por ellos.

Y sus rostros hablan de esa seguridad, de solidaridad, de espiritualidad.

Nota: las imágenes que se muestran constituirán la primera exposición de la institución una vez reabiertas sus puertas.

 

En saludo al Día internacional de los museos se muestra el trabajo que hoy, en condiciones de aislamiento social, realiza el Museo Quisicuaba a través de su programa socio-cultural. Museo de categoría Especial, es único de su tipo en Cuba por su inserción en la comunidad.Foto: Julio Larramendi

Sobre las imágenes, la Directora del Museo Quisicuaba, Lic. Lien Lucía García Miranda escribió:
Esta exposición fotográfica del artista Julio Larramendi es un enunciado de de luz y amor. Las imágenes que se muestran son el mas dulce extracto de la hermosura que solo da el amor.
Compartir, ser, estar y acompañar son pronunciamientos legítimos de valores humanos pátrios.
Los retratos del profesor Larramendi son un testimonio gráfico parlante de la solidaridad que extiende la mejor carta de presentación de la auténtica continuidad de la revolucion cubana.
Gracias por existir y por su obra maestro.

Foto: Julio Larramendi

Foto: Julio Larramendi

Foto: Julio Larramendi

Foto: Julio Larramendi

Foto: Julio Larramendi

Foto: Julio Larramendi

Foto: Julio Larramendi

Foto: Julio Larramendi

Foto: Julio Larramendi

Foto: Julio Larramendi

Foto: Julio Larramendi

Foto: Julio Larramendi

Foto: Julio Larramendi

Foto: Julio Larramendi

Foto: Julio Larramendi

Foto: Julio Larramendi

Otros artículos del autor:

Cultura Fotorreportajes
Colaboradores:

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *