No pocos años lleva Antonio Lewis dedicando su vida a la cerámica. Su participación en muestras colectivas, exposiciones personales, certámenes, eventos y la concepción de proyectos dan fe de su amor y pasión por la vetusta manifestación; con la idea de incorporar nuevos saberes viajó recientemente a Uruguay y regresó con deseos renovados de mantener vivo ese arte identitario del territorio.
Invitado por la Asociación de Ceramistas Uruguayos asistió al VI Encuentro de Ceramistas Mercedes Soriano y ofreció conferencias en el propio evento y las escuelas de Artes y Artesanías Dr. Pedro Figari y de Formación Media. De la nación sudamericana volvió con una certeza: “La cerámica ha decaído en la Isla porque hay muchos creadores buenos pero nadie se dedicó a formar a otras generaciones”.
“En el Mercedes Soriano, donde estaban presentes artistas de ocho países, participé en diversos talleres y recibí conferencias bien importantes. Allí llevé mi proyecto Arte con fuego el cual gozó de buena acogida por los ceramistas, especialistas y directivos de centros culturales. Mi exposición la realicé el primer día y pensé que irían pocas personas, pues todos estaban inmersos en la organización de las tareas del programa, pero me sorprendió que el teatro se llenara. De ahí salieron varias intenciones, como la idea de trabajar con unos chilenos y asistir a un encuentro en Paraguay.
“Luego del evento viajé a Montevideo, ciudad donde tuve el privilegio de presentar mi quehacer en la Dr. Pedro Figari y la Escuela de Formación Media y la cantidad de público fue increíble. Lo mismo encontrabas muchachos de 17 años que hombres de 80. Es placentero ver cómo las diferentes generaciones se incorporan al estudio de la cerámica sin importar la edad.
“La posibilidad de visitar e intercambiar con artistas también me aportó mucho en lo profesional y personal. En el 2020 estaré impartiendo talleres oficiales en la Escuela de Artes y Artesanías. Todo lo relacionado con la cerámica me interesa, en especial lo que se hace en esos lugares donde el proceso de la arcilla es muy primitivo. Como te decía, tanto en la Isla como en el resto de las provincias no tiene el realce de antes y se debe a que no hay eventos que propicien la enseñanza y la creación.
“Aprendí varias técnicas que bien pudieran utilizarse ahora que hay dificultades con el petróleo. Ver la confección de un horno para la quema con leña y seis horas después sacar las piezas para mí fue de las cosas más interesantes que vi. En ese tiempo alcanzó la temperatura de 1 100 grados y nosotros aquí con los eléctricos estamos de ocho a nueve horas para lograrlas.
“Entre mis propósitos está el socializar, a través de una conferencia, con el resto de los creadores aquí en la Isla lo aprendido. Además, quiero hacer la propuesta de que el próximo Encuentro Municipal de Cerámica Artística Pinera que se celebra durante la etapa vacacional sea propiamente de superación; que los valiosos artistas del Municipio enseñen a aquellos que quieran aprender el arte que por décadas hemos defendido”.
Para Lewis, el único representante de Cuba en el Mercedes Soriano y otros de Argentina, Brasil, Bolivia, Colombia, eventos como ese, que busca generar un espacio de intercambio e investigación a propósito de la cerámica, son válidos en lo fundamental porque mantienen con buena salud la labor de la cerámica.
