Joven feliz de lo que hace

Foto: Diego Rodríguez Molina

Melissa Mavis Villar De Bardet cumplió 21 años este verano, pero lo vivido en los últimos meses de sus 20 testimonia el heroísmo de una joven federada en estos tiempos de pandemia y acoso.

¿Desde cuándo te vinculas a las actividades de la Federación de Mujeres Cubanas (FMC)?

“Prácticamente desde que nací. Desde pequeñita estoy viendo y acompañando a mi mamá y a mi abuela en su quehacer como líderes en la organización femenina y en los CDR, ya sea ayudando a confeccionar cadenetas o en otras tareas del barrio.

“Luego como pionera, estudiante y activista cooperé con la cotización, declamé poesías, bailé en presentaciones en la cuadra y leí comunicados en la delegación 2 Fe del Valle del bloque 3 de la Federación en La Demajagua”.

¿Qué representa para ti esa organización con 60 años ya?

“Para mí es la organización en la cual me siento muy bien representada como cubana y como revolucionaria para dar más de nosotras mismas y cumplir con las importantes misiones encomendadas por Fidel para seguir haciendo la Revolución de nuestras mujeres dentro de la Revolución mayor de la Patria.

“Por eso con mucho regocijo integré la brigada juvenil municipal de la FMC que dará continuidad a las tareas frente a la covid-19 en mi comunidad, donde los jóvenes nos movilizamos en varias labores, estrechamos lazos con las organizaciones y hasta nos burlamos de las mayores limitaciones del bloqueo impuesto por el gobierno de Estados Unidos”.

¿Cómo ha sido tu participación en esta batalla contra la pandemia?

“Una experiencia inolvidable durante los meses en que los estudiantes universitarios tuvimos que permanecer en casa luego del aplazamiento del curso escolar; nos incorporamos a ayudar a personas vulnerables, a trabajos voluntarios en la producción de alimentos y puntos de desinfección, así como en la organización de colas, el enfrentamiento a revendedores y otras faenas junto a Salud Pública y el Ministerio del Interior”.

Relata entusiasmada que como federada y militante de la UJC participó, además, en recorridos junto a las máximas autoridades por comunidades alejadas, en las ofertas comerciales y gastronómicas hasta asentamientos rurales y rememora orgullosa el estar entre las muchachas que establecieron el primer punto de saneamiento en el acceso a un poblado y por cuya efectividad recibieron elogios.

“Igualmente tuve una vivencia muy estimulante, –comenta– la de haber trabajado junto al Consejo de Defensa de Zona y como periodista, cuya carrera curso en el último año; he publicado en el periódico Victoria y su página web, así como en el telecentro Islavisión con videos y fotos, acerca de las experiencias comunitarias”.

Como parte de ese desempeño significa “la grata sorpresa de recibir la carta de reconocimiento que me enviara Zunilda García Garcés, presidenta del Consejo de Defensa Municipal y primera secretaria del Partido en la Isla, por haber dejado en video y otros materiales comunicativos las vivencias en esa histórica etapa”.

Entre tantos momentos evoca “la celebración del Día Internacional de la Infancia con un espectáculo móvil que llegó hasta La Demajagua con distracción y alegría para los niños que no podían salir de casa.

“Yo hacía todo sin dejar de cuidarme ni de participar en concursos como el municipal del Primero de Mayo en el que fui una de las premiadas con la foto Mi casa es mi plaza; tampoco dejé de dedicarme al trabajo final de la carrera de Periodismo en la Universidad de La Habana con testimonios y otros géneros vinculados a recuperados de la covid-19 y demás beneficiados y valientes que hicieron posible vencer en el territorio la pandemia en menos de tres meses”.

Melissa Mavis adelantó a los lectores que “esos materiales periodísticos son parte de una serie que publicará el semanario local”, donde confiesa que sueña laborar como profesional.

Ella es una joven sencilla, pero feliz de lo que hace porque creció rodeada de valores y compromisos junto a la familia del hogar y del barrio.

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Diego Rodríguez Molina
Diego Rodríguez Molina

Licenciado en Periodismo en la Universidad de La Habana. Tiene más de 40 años en la profesión

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