Los Comités de Defensa de la Revolución (CDR) en la Isla de la Juventud realizan de forma organizada la recepción de donativos a los damnificados del tornado que afectó el 27 de enero pasado a la capital de todos los cubanos.
Los cederistas junto a las federadas expresan en distintos escenarios su solidaridad hacia las personas damnificadas y la disposición de aportar ropa, utensilios de cocina y otros recursos que recolectan primero en puntos de sus barriadas y luego envían a la sede de los CDR en el territorio, en calle 24 entre 43 y 45 en Nueva Gerona, desde donde a partir del día 15 de febrero saldrá la valija que la dirección nacional de la mayor organización de masa entregará a los consejos de defensa municipales en los territorios afectados en La Habana.
Así lo dio a conocer Rosaida Vázquez Corrales, integrante de la Dirección Municipal de los CDR y responsable de Vigilancia, trabajo ideológico y prevención, quien explicó que igualmente se ha expresado el deseo de donar dinero, lo cual se realiza directamente en los bancos, en cuantas habilitadas en moneda nacional y en divisas convertibles.
Uno de los primeros en sumarse al movimiento solidario fue el CDR 6 de la zona 38 en Sierra Caballos y las federadas de la delegación 6 del bloque 38 de la FMC, donde la joven secretaria general Daylamis Rosabal Reyes manifestó de todos en el barrio de no solo compartir el dolor con los que sufrieron el duro azote, sino también la voluntad de donarles pantalones, blusas, camisas, zapatos, toallas, sábanas, medios de aseo personal, entre otros que además de ser útiles, ratifican la hermandad de los cubanos en las circunstancias difíciles.
Similares pronunciamientos hicieron los participantes en el barrio debate celebrado en la zona 27 de los CDR en el Consejo Popular de Abel Santamaría en apoyo al referendo convocado para el 24 de febrero para ratificar la nueva Constitución, texto que, se dijo, defiende y alienta a esos valores de humanismo que compartimos hoy y reefrenda los principios y derechos conquistados por los cubanos, así como las aspiraciones de seguir perfeccionando nuestra sociedad.
Las federadas también se han volcado a la organización y recepción de donativos, a los que aportan igualmente varias instituciones, cuentapropistas y grupos de personas, así como niños con uniformes y recursos escolares, en otra expresión del desprendimiento y la elevada sensibilidad del pueblo.
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