Detrás del Victoria…un basurero (+ Audio)

La mirada resulta obligatoria, una no puede mostrarse indiferente ante tanta suciedad porque está ahí, a la vista de todos y quienes han seguido con detenimiento su crecimiento –como esta periodista– no pueden más que cuestionarse hasta dónde llegará y perdurará el basurero que yace detrás de la redacción del periódico Victoria y del parque recreativo juvenil Ahao.

Llevo varias semanas pasándole por al lado. He visto personas echar desechos de todo tipo a cualquier hora del día. En cierta ocasión encontré a una compañera muy bien arropada, hasta con sombrero y guantes, husmeando en el lugar:

–Buenos días, ¿sabe desde cuándo quitaron el contenedor?

–No sé en realidad, soy de Sierra Caballos, vengo en busca de trapos o telas que me puedan servir para hacer mis alfombras, soy artesana, pero en verdad esto está…

Ahí se encuentra de todo como en botica, desde ropas en desuso hasta nailon, latas, botellas y otros recipientes que con las lluvias caídas pueden convertirse en el medio ideal para criaderos del Aedes; además de los cartones, plásticos, ramas de árboles y algún que otro roedor e insecto. Hasta auras tiñosas merodean en busca de alguna presa.

Para abundar al respecto dialogamos con varios vecinos del llamado reparto Militar, quienes se refirieron a la inestabilidad con la recogida de basura y el retiro “hace cerca de dos meses” del contenedor, por lo cual se ven obligados a echar los desechos de sus hogares en ese espacio, convertido ya en un microvertedero que afecta el medio ambiente y la salud de las personas.

Idalmis Naranjo, manifestó al respecto:

Por su parte otra vecina, embarazada, alegó:

El recorrido incluyó, además, el parque Ahao, donde Mariluz Corría, administradora, aseguró no echar los desechos que genera la unidad en el ilegal basurero porque disponen de tanques, que entre viernes o sábado son recogidos por los trabajadores de la Empresa de Servicios Comunales; sin embargo, puntualizó que no deja de afectarlos, pues constituye un foco de infección.

Hasta la dirección de la entidad encargada de la recogida de desechos, esa tarea muy cuestionada en los últimos meses debido a la inestabilidad en la recogida, a lo que se suman la falta de una cultura de higienización entre los ciudadanos, encaucé los pasos para esclarecer algunas interrogantes.

Pensé que resultaría más engorroso encontrar respuestas, pero no, justo al llegar salía Josefa Bueno Savón, jefa del departamento de Higiene, quien explicó:

Josefa corrobora la existencia de un sistema establecido por la empresa para la recolección de los desechos, al tiempo que hace alusión a la indisciplina de no pocos pineros y a la ausencia del contenedor en el reparto Militar:

Más adelante hizo un llamado a los pobladores:

Consideraciones para un… ¿final?

Lo cierto es que la recogida de basura en la Isla amerita miradas más profundas tanto por Servicios Comunales como por los pineros, quienes no siempre contribuyen con el correcto saneamiento porque muchas veces, existiendo los depósitos, echan la basura fuera o la tiran en cualquier esquina, entorpeciendo la higiene de la ciudad o comunidad.

Es verdad que suele ser molesto andar por ahí caminando un par de cuadras en busca del contenedor, nadie lo niega, como tampoco que la lógica de “yo lo hago, y el otro también, y el otro…” solo lleva a los basureros, a que los ratones e insectos encuentren donde divertirse a plenitud, con las consecuencias para la salud humana que ello trae, además de agravar la situación que tiene la entidad con los depósitos, el parque de vehículos y otros recursos para realizar con eficiencia tan importante faena.

No obstante, considero que la empresa puede reevaluar la actual ubicación de los 34 contenedores de los 38 existentes en todo el territorio, pues cuatro en la actualidad están rotos, con vistas de centrarlos donde más sea efectivo porque no puede ocurrir que los pobladores sientan la sensación de la legalidad de un microvertedero.

La falta de combustible afecta, sí, no solo a Comunales sino a todos de una manera u otra, pero no debe constituir un impedimento para lograr mayor organización, coherencia y sistematicidad en la recogida de esos desechos domésticos que generan las ciudades; para lo cual vale explotar más el empleo de carretones aprobados ya por el Consejo de la Administración.

Se trata de la voluntad de tener entre todos un entorno menos sucio y cuando lo amerite acudir a lo legal, a las multas por las infracciones y violar lo establecido. El asunto es que urge transformar el actuar, buscar la manera de que nuestra Isla luzca esa higiene ambiental, que ni en los años más cruentos del período especial, se dañó tanto porque hasta en esa compleja etapa la salud y el bienestar de sus habitantes siempre fue una prioridad.

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