La inauguración del Instituto Preuniversitario Vocacional de Ciencias Exactas (IPVCE) América Labadí Arce está entre las novedades del curso escolar, a las que se suman en la escuela pedagógica Martha Machado Cuní la especialidad de profesores de Biología y la formación de maestros para la Educación Artística de Primaria y Secundaria Básica
El presente curso escolar inició en la Isla de la Juventud con la incorporación de más de 14 mil estudiantes a las aulas en la enseñanza general y con la inauguración de un nuevo centro de estudios, el Instituto Preuniversitario Vocacional de Ciencias Exactas (IPVCE) América Labadí Arce.
Hace ya 45 años el Municipio Especial tuvo la alegría de abrir las puertas a lo que fuera la escuela primaria más grande del territorio pinero, Abel Santamaría Cuadrado, y precisamente un tres de septiembre –como aquel añoso lunes– la educación aquí dio hoy la bienvenida al tan anhelado por los educandos locales: IPVCE, que en cursos anteriores funcionaba como parte de otro centro.
En una mañana cargada de emociones los 102 estudiantes que conforman la matrícula de esa vocacional, junto a familiares, profesores y autoridades del Municipio inauguraron de manera oficial el curso escolar 2018–2019.
Nuris Peña Rodríguez, directora municipal de Educación, expresó en el acto de inicio de curso celebrado en el novedoso instituto las prioridades de este año lectivo entre las que figuran la concepción de un modelo de preuniversitario más eficiente y funcional; así como la atención especial a la escuela pedagógica Martha Machado Cuní, donde se abre la especialidad de profesores de Biología y la formación de maestros para la Educación Artística de las enseñanzas Primaria y Secundaria Básica.
Asimismo fueron reconocidos trabajadores, directivos de organismos, especialistas y docentes, a la vez que los presentes disfrutaron de las presentaciones de las estudiantes Hadia Jussein Almira, Indira Bello Sosa y Chris Núñez Villavicencio, en tanto el compromiso del estudiantado se pronunció en la voz de Lina Franchesca López Mengana
Nuevamente llega septiembre cargado de objetivos, sueños por realizar, se alza vigorosa otra vez la bandera de la estrella solitaria y con ella una lluvia de esperanzas que solo pueden traer las luces de una nueva escuela.