Abdala –la vacuna cubana de probada eficiencia que ya corre por las venas de más del 61 por ciento de la población pinera– llegó una vez más al territorio insular, esta vez para inmunizar a un grupo vulnerable, las embarazadas, puérperas y madres lactantes.
“Un total de 880 féminas recibirán el esquema completo de este fármaco, tres dosis en intervalos de 14 días, en los policlínicos de sus áreas de salud”, aseguró el doctor Víctor Doeste, coordinador de la intervención sanitaria en la Isla.
“Tuvimos en cuenta los criterios de inclusión y exclusión establecidos en el protocolo que responden a gestantes en segundo y tercer trimestres de embarazo, mayores de 19 años, que al momento de la vacunación no presenten enfermedades infecciosas agudas o enfermedades crónicas no trasmisibles descompensadas, además no se les aplicará a las alérgicas al tiomersal o quienes hayan padecido la covid 19”, explicó.
La directora del policlínico Leonilda Tamayo Matos, Inés Georgina Santana Nápoles, explicó que durante miércoles y jueves se aplicó la vacuna a las residentes en los consejos populares más cercanos a la unidad asistencial, mientras que el viernes se moverán a las comunidades alejadas como la Orlando Gutiérrez (31) y la Micaela Bastidas 27. Esta estrategia será también la asumida por los restantes policlínicos del territorio.
Aunque la inmunización con Abdala no garantiza que el peligro ante la covid 19 esté eliminado por completo, sí representa un paso importante en la batalla contra la pandemia.
“Era algo que muchas estábamos esperando con ansias porque minimiza el riesgo. Ahora toca no perder de vista las medidas como el distanciamiento físico, el uso del nasobuco y la desinfección de manos, todas estas acciones en conjunto son las que de verdad van a protegernos a cada una, a las familias y en especial a nuestros bebés”, así dijo Arianna López Pérez, una de las mamitas beneficiadas con la vacuna aquí.
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